Argentina: Buscan reflotar el cultivo de frutos tropicales

Argentina
Argentina: Buscan reflotar el cultivo de frutos tropicales

Cuenta un productor de bananas de la salteña Orán que en los 90 fue al Ministerio de Economía a pedir socorro porque el ingreso de esa fruta desde Ecuador amenazaba a su sector. “¿Pero cómo? ¿La Argentina produce bananas? ”, fue la asombrada frase que en aquel momento partió de boca de Horacio Liendo, el segundo de Domingo Cavallo.

La anécdota es clara respecto del desconocimiento general sobre una actividad que, de reactivarse, podría sustituir importaciones por US$ 80 millones anuales. Hasta los 80, la oferta de la fruta del norte del país cubría hasta 80% de la demanda.

Pero una década después se habilitó el grifo para el ingreso de la fruta de Ecuador (algunos aseguran que a cambio de que Techint pudiese exportar sus tubos) y todo cambió: hoy quedan menos de la mitad de las 8.000 hectáreas de aquel entonces y con suerte la oferta local cubre una quinta parte de la demanda.

En el marco de Frutar 2011, la exposición frutícola que se realiza en Formosa, se lanzó unos días atrás la Mesa Nacional de Frutos Tropicales. Se trata de dotar de rango de política nacional a un intento para reflotar aquel sector productivo y estimular la producción de otras frutas, como el ananá, el mango, la palta o la papaya. Aunque sea difícil de creer, el país tiene capacidades agronómicas para producir esas especies, que hoy se importan.

Con compras por casi US$ 67 millones en 2010, la banana es el principal producto agropecuario que importa el país, superando incluso al café o al cacao. Ingresaron casi 350.000 toneladas, un volumen equivalente a la carne vacuna exportada por la Argentina. Ecuador, con US$ 42 millones, es el principal proveedor, seguido por Bolivia (13 millones) y Brasil (8 millones). Al año, cada argentino consume 12 kilos de bananas.

Pero el país también es deficitario en el resto de cultivos tropicales. El año pasado, gastó US$ 9,5 millones en paltas; 2 millones en ananás y hasta 320.000 en cocos. Salvo en el último caso, hay experiencias productivas que podrían sustituir esas importaciones. Por caso, en Tucumán existen 1.500 hectáreas con palta, cerca de Oberá hay ananá, y en Orán, bananas, mangos, ananes y papayas. También hay oferta en Formosa. Motorizada por el Ministerio de Agricultura, las provincias norteñas y las organizaciones de productores de frutas tropicales, la Mesa Nacional trazará primero un diagnóstico, para luego encarar acciones. Lo primero, según expertos del INTA Yuto, será investigar nuevas variedades y tecnologías. Es que esas regiones no son tropicales sino subtropicales. Y más de una vez se corre el riesgo de que las cosechas se marchiten por las heladas. “Nuestra banana es más sabrosa que la ecuatoriana”, desafía

Alejandro Murphy, gerente del cluster bananero que acaban de formar 70 productores salteños.

“Un árbol frutal extraordinario”
Los árabes y los griegos definían con esta halagadora frase al plátano, cuyas propiedades beneficiosas para la salud se conocen desde hace miles de años. En la India recibía el nombre de “la fruta de los sabios”, ya que, según una antigua leyenda, los más insignes pensadores hindúes meditaban bajo su sombra mientras comían de su fruto, símbolo de fecundidad y prosperidad. El plátano no es sólo de una de las frutas más consumidas en el mundo entero, sino también una de las más sanas. Su sabor es dulce y delicioso, es una fruta rica en vitaminas C y B6 y minerales esenciales, y se caracteriza por dotar de sabor a infinidad de platos.

Sus propiedades:
• Una de las frutas más nutritivas.
• Ideal para personas que desempeñan actividades físicas.
• Beneficioso contra úlceras de estómago.
• Bueno contra el colesterol.
• Previene calambres si se toma antes del ejercicio físico.

Fuente: Nuevo Diario Web

Suscríbete a nuestro Newsletter