Se encienden las alarmas en Nueva Zelanda tras detección de mosca de la fruta
Un espécimen se encontró en un suburbio de Auckland
La detección de un espécimen macho de la mosca de la fruta de Queensland (Bactrocera tryoni) en Nueva Zelanda ha encendido las alarmas en el país, luego que esta sea considerada la peor peste frutícola en el mundo.
Fotografía: Queensland Goverment
El Ministerio de Industrias Primarias de Nueva Zelanda (MPI) informó que el insecto se encontró en una trampa en el suburbio de Mt Roskill en la ciudad de Auckland el 8 de mayo, para luego ser identificado el 9 de mayo.
Andrew Coleman, director general adjunto de cumplimientos y respuestas del MPI señaló que la detección de este único espécimen no significa que exista una gran población del insecto en Nueva Zelanda, pero las autoridades están trabajando en la zona, revisando las propiedades y colocando trampas adicionales, para determinar si hay más moscas.
“Este insecto es un organismo no deseado que podría tener serias consecuencias para la industria de Nueva Zelanda. Puede dañar a un amplio rango de frutas y vegetales”, dijo.
Coleman indicó que desde 2006 el Ministerio ha interceptado, en 53 ocasiones, especies de mosca de la fruta en la frontera, evitando que una población se establezca en el país.
Agregó que la mosca de la fruta de Queensland ya había sido detectada en dos ocasiones anteriores en Nueva Zelanda (en Northland en 1995 y en Auckland en 1996) y en ambas oportunidades no se detectaron poblaciones del insecto.
El represente del MPI indicó que la forma más probable en que la mosca puede ingresar al país es a través de fruta fresca.
Medidas de contención
Se informó que se implementará un área de control en donde se aplicarán ciertas restricciones, entre ellas el control sobre el movimiento de material vegetal y frutícola fuera de la zona.
Junto con esto el MPI ya tienen requisitos de importación bastante estrictos para minimizar los riesgos, en donde todo material vegetal y frutícola que pueda ser huésped del insecto tiene que pasar por un tratamiento previo a su importación, así como contar con certificados.
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