Presidente de Decofrut sugirió a los exportadores de cerezas chilenas crear programas con el retail estadounidense
Dado que el volumen de producción de cerezas chilenas se duplicará en cuatro o cinco años, Manuel José Alcaíno, analista experto de la industria frutícola sugirió que encontrar mercados alternativos para el fruto sería una buena idea.
Durante la inauguración de la primera versión del Global Cherry Summit celebrado en San Francisco de Mostazal el miércoles pasado, el presidente de Decofrut, Manuel José Alcaíno realizó una presentación en la que mostró cómo la industria está poniendo todas las cerezas en una sola canasta: China.
Alrededor del 90% de las 187.142 toneladas métricas de exportaciones de cerezas chilenas fueron destinadas a Asia durante la campaña 2017-18, mientras que el 96% de ese volumen fue despachado al mercado chino.
En comparación, Norteamérica recibió sólo 8.122 toneladas métricas, lo que podría significar un acuerdo comercial que la industria aún no ha explotado completamente.
"Los estadounidenses consumen un volumen (de cerezas) en el mercado doméstico que es superior a lo que exportamos a todo el mundo durante este año. Eso es aproximadamente 200.000 toneladas métricas", sostuvo Alcaíno.
"Supongamos que podemos negociar programas para cuatro o cinco millones de cajas a Estados Unidos", comentó.
Al proponer un ejercicio hipotético donde la industria pudo lograr precios minoristas de USD 12 por kilo, dijo que esto equivaldría a precios de alrededor de USD 30 FOB por caja que podrían generar un retorno razonable y quitar presión de los volúmenes en China.
"Pensando en el mercado estadounidense, tomar volúmenes e invertir en el futuro, para mí tiene mucho sentido", dijo el presidente de Decofrut.
Alcaíno mencionó dos de los mejores períodos para las ventas en el mercado de Estados Unidos: Antes del Día de Acción de Gracias y Navidad, por lo que los exportadores deberían intentar vender en esos momentos.
"Podemos ver que, en realidad, los precios de las cerezas chilenas disminuyen de una manera que no es significativa, pero si notoria, y está muy en los límites de lo que hemos dicho", mencionó, refiriéndose a lo que se considerarían los precios ideales.
Pero esto puede deberse simplemente al enfoque chileno en el mercado estadounidense hasta la fecha.
"Por favor, no continuemos con la idea de que esta fruta va a China, y lo malo va a Estados Unidos", comentó Alcaíno.
"Esto requiere un esfuerzo que no se ha hecho. ¿Qué implica ese trabajo? Consiste en preparar programas. Debes sentarte con las cadenas minoristas en Estados Unidos y explicarles lo que sucederá".
Alcaíno comentó que estos programas necesitarían tener tamaños predeterminados que serían menos exigentes que los usados para el mercado chino.
Por otro lado, los exportadores no podrían esperar que un gran porcentaje de sus frutas cumpliera con las especificaciones de calidad del “US # 1” (programa que exige que el porcentaje de defectos no supere el 12%) y que debían enfocarse en llevar las variedades correctas para el mercado estadounidense en términos de firmeza y crocancia, pero que a su vez tendrían un mayor porcentaje de pitting que lo que exige actualmente el programa.
Agregó que el sector también necesitaba encontrar una alternativa al actual formato de bolsa de 500 gramos que se usa actualmente para enviar cerezas al mercado de Estados Unidos.
Perspectivas para el sector de las cerezas de EE.UU.
El presidente de Northwest Cherries, B.J. Thurlby, estuvo de acuerdo en que Chile podría enfocarse más en el mercado estadounidense y enfatizó que sólo uno de cada tres de sus compatriotas consume actualmente cerezas, pero que eso podría aumentar a dos tercios.
Thurlby agregó que también hay una clase de "súper consumidores" que sólo representaba el 13% de los consumidores de cerezas pero que compraban el 35% de la fruta. Es para este subconjunto que se debe garantizar la calidad para mantener la categoría fuerte.
"Lo que estamos viendo es que los productores están siendo empujados hacia nosotros y estamos empezando a ver más y más cerezas orgánicas en Estados Unidos", comentó Thurlby.
Asimismo, indicó una gran "correlación" entre la costa del Pacífico Noroeste y Chile en términos de cerezas y el paisaje en general.
"El año pasado, en el Noroeste tuvimos la cosecha más grande de todas y, por supuesto, aquí en Chile, ustedes, los productores, tuvieron su más grande cosecha", comentó.
En lo que respecta a la producción, explicó que los productores en su región habían aumentado la superficie cultivada en un 46% en la última década, sin embargo, el aumento general del país ha sido sólo del 10%.
"Han habido otras áreas en Estados Unidos como Nueva York, Pensilvania, Michigan; este último solía cultivar muchas cerezas dulces, y las han estado sacando, por lo que hemos visto que los aumentos de hectáreas continúa, pero no tan rápido como hemos visto en el Noroeste ", destacó Thurlby.
"Pero esta es una especie de iniciador, ya que, en los últimos 10 años, la producción de cerezas en volumen ha aumentado en un 28% en Estados Unidos, y eso es porque, creo que acabamos de cambiar nuestra gestión de los huertos, y tenemos hectáreas con una mayor densidad.
También sostuvo que la superficie actual estaba muy enfocada en la variedad Bing, pero que los productores la estaban sacando para reemplazarla por variedades como Skeena o Regina.
En términos de la temporada en Estados Unidos, dijo que California recién estaba comenzando a cosechar sus primeras variedades.
"Ellos ya están hablando, y su cosecha va a bajar entre cuatro y cinco millones: esta cosecha ya es corta, simplemente no se corrigió y tuvimos algo de escarcha, entonces estamos hablando de cuatro millones de cajas", comentó.
"Hemos tenido un clima bastante frío [en el noroeste]. Tuvimos un tiempo cálido en febrero y luego simplemente bajo la temperatura, así que vamos a comenzar tarde de nuevo este año, estoy pensando que en torno al 6 de junio”.
"Sólo la mitad de nuestros distritos productores han polinizado, pero hemos tenido este clima ventoso, frío y lluvioso durante dicha etapa y estoy pensando que, si tuviéramos 22 o 23 millones de cajas este año en el Noroeste, debería ser una buena cosecha para nosotros basados en la polinización y el clima".
Finalmente, indicó que, en ausencia de grandes eventos de lluvia, la cosecha total de la costa oeste podría estar entre 27-28 millones de cajas en 2018.