Argentina: El granizo volvió a castigar la fruta en Río Colorado
El fenómeno provocó severos daños en fruta de carozo y, en el caso de la cereza, sumó un problema más a la ya disminuida producción de la temporada. También afectó peras y manzanas.
El temporal de lluvia y granizo registrado durante la jornada del jueves provocó severos daños a la producción frutícola de la localidad, donde las primeras estimaciones prevén que las pérdidas oscilarán entre el 40 y el 60 por ciento de la cosecha.
A pocas horas de haber transcurrido el fenómeno climático, claramente se pudieron ver los primeros daños en las distintas variedades de duraznos, manzanas, cerezas, peras y pelones.
Durante toda la jornada de ayer los afectados concurrieron hasta las instalaciones de la cámara que los nuclea para completar las documentaciones de las declaraciones juradas de daños.
Caras largas con bastante mal humor reinaron entre los chacareros que tenían previsto iniciar ayer con la temporada de cosecha en las primeras variedades tempranas de cerezas y se encontraron la mayor cantidad de los frutos marcados por los golpes de las piedras.
Durante todo el día jueves se registraron intensas precipitaciones con lapsos cortos y al menos en tres ocasiones (dos por la mañana y una por la tarde) el agua estuvo asociada por gran cantidad de granizo, que en distintas franjas terminó afectando principalmente a las colonias frutícolas.
Los sectores afectados fueron variados, hubo chacras donde el granizo caído tenía un tamaño chico y terminó por perjudicar a las plantaciones de manzanas , debido que se encuentran en una etapa de piel sensible. También las primeras variedades de duraznos, cerezas, peras y hasta los pelones.
Los trabajadores trataron de defender los cultivos activando los cañones antigranizo, aunque no fueron suficientes para evitar el desastre.
El resultado final se podrá conocer en las próximas 72 horas, no obstante en las primeras recorridas fueron visibles los golpes que tenían los frutos. Los primeros cálculos por las pérdidas en toda la producción de frutas variarían entre el 40 y el 60 por ciento, hecho que tendrá un fuerte impacto económico para la zona.
Con los primeros rayos de claridad, la desazón embargó a los propietarios de plantaciones de cerezas que tenían previsto iniciar la cosecha ese mismo día y lo que se temía terminó por ser realidad. Gran parte de los frutos se encontraban golpeados y marcados.
"Es increíble, es cosa de no creer, otra vez el tiempo esta en contra nuestra", comentó unos de los productores.
Fuente: Rio Negro