Lombricultura: Ahorro en el uso de fertilizantes y mejora de los cultivos

La lombricultura destaca como un sistema que permite a los productores ahorrar dinero debido al menor uso de fertilizantes, como también por permitir una mejora en la calidad de los cultivos.

Roberto Verdejo, especialista y productor de lombrices explicó a PortalFrutícola.com que la lombricultura intensiva se puede aplicar a todo tipo de cultivos; tales como árboles mayores, frutales, arbustos – como los berries – y hortalizas.

De acuerdo a Verdejo, en la industria agrícola existe el prejuicio de que este sistema es más adecuado para la pequeña agricultura y la producción de orgánicos; siendo que es apto para cualquier cultivo que necesite algún tipo de fertilizante.

“La lombricultura intensiva, no solo sirve para la pequeña producción agrícola familiar, sino que también para los predios agrícolas de 5, 10, 50 o 200 hectáreas o más”.

El especialista indicó que lo anterior se debe a que la principal producción de esta técnica es el bioestimulante, también conocido como “líquidos humificados”; además del humus de las lombrices.

Ambos productos se producen al inmediatamente al regar las lombrices, pudiendo ser utilizado como fertilizando líquido o foliar.

Verdejo sostuvo que la lombricultura intensiva permite mejorar la producción y calidad de los cultivos; como también duplicar el crecimiento de las plantas, ya que las lombrices producen la fitohormona, ácido giberélico.

Algunos resultados de esta técnica demostraron que se puede reducir el tiempo que tardan los arándanos en producir frutos; debido a que de forma normal ese plazo es de 3 años y mediante el uso de lombricultura se puede obtener fruta a los dos años.

“Al realizar análisis de nutrientes en las hojas de una producción de cerezo; estos arrojaron la presencia de nutrientes estables que mejoraron y aumentaron el tamaño de las hojas al doble; optimizando la calidad del fruto y la resistencia de enfermedades al árbol”, explicó el productor.

Otra de las ventajas de este sistema es el ahorro en fertilizantes, tanto químicos como orgánicos. “No necesitas comprar fertilizante orgánico con el agua de las lombrices”, sostuvo Verdejo.

Asimismo, la automatización del riego permite que el trabajo diario que implica mantener la lombricultura sea muy bajo.