Según la administración rionegrina, a la proyección del Balance del Complejo Frutícola Regional en 2015 se le 'debería sumar la pérdida de rentabilidad.

La crisis frutícola en Río Negro provocó ayer un fuerte cruce entre el gobernador local, Alberto Weretilneck, y el ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, Carlos Casamiquela, quien acusó al mandatario de no "reconocer que su Gobierno es el primer destinatario de los reclamos de los productores", y de "soslayar las responsabilidades inherentes de su Gobierno con la mayor economía de su territorio provincial".

Durante la mañana, y mientras comenzaba una serie de movilizaciones y manifestaciones en la provincia para exigir medidas urgentes para el sector, el Gobierno local emitió un comunicado en el que "avala los pedidos de los productores con referencia a medidas de fondo que posibiliten generar cambios estructurales, a nivel macro, que permitan revertir la actual situación de crisis, y que superan el alcance provincial".

Según la administración rionegrina, a la proyección del Balance del Complejo Frutícola Regional en 2015 se le "debería sumar la pérdida de rentabilidad que se produce por el crecimiento de los costos internos respecto de los precios de los distintos mercados, y los volúmenes enviados a cada uno de ellos".

Así, el balance económico global "fuertemente negativo" superaría los 180 millones de dólares.Adhiere: Casamiquela recibió el mensaje y aseguró, entre otras cosas, que desde la cartera que lidera "todavía esperamos las resoluciones del Gobierno provincial -declaración de la emergencia por granizo a través de un decreto provincial- que permitan poner en marcha los mecanismos de ayuda y asistencia previstos en la legislación nacional a los productores afectados por el granizo".

El cruce entre el funcionario y el gobernador se dio a cinco días de haberse reunido -el jueves último- en la Ciudad de Buenos Aires junto al senador nacional Miguel Pichetto -rival electoral directo del mandatario este año-, donde acordaron el pago de Aportes No Reintegrables a productores de peras y manzanas de Río Negro y Neuquén para la cosecha de las frutas en la presente temporada.

En una primera etapa, que se activará el 23 de febrero próximo, se desembolsarán $ 110 millones -de un total de $ 300 millones-, de los cuales el Gobierno local aportará $ 50 millones; Nación, una cifra similar y Neuquén, $10 millones.

Sin embargo, los anuncios parecieron no impactar en los productores, que marcharon ayer en la provincia con una movilización de más de 300 tractores, generando importantes demoras en la circulación del tránsito.

Por ejemplo, entre Cipolletti y Fernández Oro, se extendió una fila de vehículos por más de seis kilómetros. En tanto, la circulación de la mano del puente que une la capital neuquina con la primera ciudad estuvo bloqueada por la mañana.

En la reunión del jueves pasado, Casamiquela, Weretilneck y Pichetto acordaron una nueva reunión para marzo, donde participarán también las Adhiere: cámaras de productores, con el objetivo de avanzar en políticas para el sector que apunten a trabajar sobre la diversificación de dicha industria.

Fuente: Noticias AgroPecuarias