El presidente de Federación Agraria Argentina, Eduardo Buzzi, comparó ayer al modelo económico kirchnerista con el implementado por Carlos Menem durante los 90, al afirmar que el dólar planchado, las altas tasas y el pago de la deuda externa llevarán a la quiebra a decenas de miles de pequeños y medianos productores agropecuarios argentinos.

? “Hay 60.000 productores menos desde 2002, porque el bastardeo del Estado lleva al liberalismo”, denunció durante el acto de apertura del 98º Congreso anual de la entidad, que reunió a unos 1.200 delegados bajo el lema “Políticas públicas diferenciadas para una agricultura con agricultores”.

? En un largo discurso salpicado con chistes y mensajes para varios bandos, el dirigente ruralista se dedicó sobre todo a demoler la política agropecuaria de la administración nacional, a la que si bien le reconoció dos o tres avances puntuales —como la creación de un Ministerio de Agricultura, la implementación de la emergencia agropecuaria y la existencia de un plan estratégico agroalimentario— le endilgó una larga lista de defectos que van desde el deterioro de la calidad institucional y del federalismo financiero, hasta la pérdida de la libertad de prensa.

? “Estamos en un país sin inversiones, lleno de incertidumbre y con números que se esconden”, aseguró, para denunciar que el rumbo económico del Ejecutivo “está más cerca de la Convertibilidad que de un modelo virtuoso”.

? Bajo la mirada del gobernador Hermes Binner y de un grupo variopinto de diputados nacionales que iban desde el peronista disidente Francisco de Narváez hasta los “federados” Pablo Orsolini y Ulises Forte, Buzzi insistió con la necesidad de que los pequeños y medianos productores estén exentos del pago de las retenciones. Sólo así, argumentó, podrá evitarse la tendencia al monocultivo de soja y el despoblamiento de los campos argentinos.

? Además, instó a limitar o prohibir la integración vertical de los grandes jugadores del sector, lo que pone fuera de carrera a todos aquellos con menores escalas de producción.

Pedidos sectoriales

El dirigente empezó su lista de pedidos con un reclamo a la presidenta Cristina Fernández para que cumpla con los reintegros a los productores de trigo prometidos en septiembre del año pasado. “Lo anunciaron hace un año, pero al día de hoy cobraron esos reintegros menos de 50 productores sobre los más de 9.000 que se presentaron”, se quejó, y alertó sobre medidas de fuerza en breve si no se corrige esa situación. 

También criticó la creciente concentración y extranjerización de tierras, una tendencia que pone al más chico en posición de debilidad y lo obliga a sembrar soja ya que es lo único rentable: “Es el refugio obligado de los que no tenemos otras alternativas”, dijo. 

Buzzi aseguró también que la política ganadera de los K es “la peor en décadas” y que las restricciones a la comercialización del trigo son “un disparate”. 

El presidente de la FAA aseguró que existe hoy en Argentina un “nuevo capitalismo de amigos” que privilegia la concentración de la renta y que llevará a la desaparición de los pequeños y medianos productores bajo la siguiente secuencia: desfinanciamiento, endeudamiento y quiebra.

“Hoy sólo hay lugar para la gran escala”, bramó. Por eso pidió, una y otra vez, retenciones segmentadas y una ley de arrendamientos que privilegie el mediano y largo plazo y a los actores productivos por sobre los especulativos.

Mensajes

Pero el gobierno nacional no fue el único blanco contra el que apuntó el dirigente. Consultado sobre la esperanza de vida de la Mesa de Enlace, Buzzi alertó que si bien nadie puede decretar la muerte de esa instancia, sí es impostergable que el resto de la entidades agropecuarias cobije y tome como propios los reclamos fundamentales de Federación Agraria: retenciones segmentadas, ley de arrendamientos y plan ganadero. 

“La mesa de enlace debe representar los intereses de los pequeños y medianos productores si no quiere extinguirse”, advirtió, para reconocer que, a pesar de las cada vez más marcadas diferencias ideológicas entre sus integrantes, los unen algunos reclamos concretos. 

También tuvo palabras para la oposición, a la que le exigió que —en pleno precalentamiento para la elección presidencial— tome posturas claras y defina a quienes favorecerían en caso de llegar al poder: “Si a las megaempresas concentradas, o a una nueva camada de productores nacionales”. 

Además, aprovechó para agradecer el apoyo social recibido durante el conflicto con el gobierno por las retenciones y dijo que a la inflación en los precios de los alimentos “la tiene que explicar Moreno”.

Fuente: ON24