España: Auguran desafíos para clementinas valencianas si no se renegocia Acuerdo con Sudáfrica
La asociación Asaja Alicante afirmó que van a generarse grandes desafíos, si no que revisa el acuerdo de cítricos con Sudáfrica.
De acuerdo con ellos es necesario "realizar una renegociación de las condiciones e incluir cláusulas de salvaguarda que impongan aranceles y prohíban la llegada de cítricos del continente vecino cuando se inicie la campaña española", consignó el medio Valencia Fruits.
La organización denunció una "escasa moralidad y compromiso de las cadenas de Gran Distribución y supermercados con los productores españoles y los consumidores europeos al rechazar la compra de las primeras mandarinas españolas, hundiendo el inicio de la campaña, mientras aprovisionan sus cámaras frigoríficas de forma masiva de mandarinas de Sudáfrica".
Campaña española
Por otra parte, el medio local de noticias hizo hincapié en los problemas que enfrenta la industria de cítricos española.
Señalaron que las Grandes Cadenas de Distribución, no están comprando frutas españolas, mientras que si están comprando las mandarinas sudafricanas.
“No se vende ni una. Los supermercados no quieren clementinas españolas mientras queden mandarinas de Sudáfrica", declaró el presidente de Jóvenes Agricultores Asaja Alicante, José Vicente Andreu.
A lo anterior sumó que "las grandes cadenas de supermercados están llenando sus cámaras frigoríficas de mandarinas del continente vecino, con lo que es posible que dispongan de stock todo el mes de octubre y no se plantean comprar cítrico español, lo que significa echar a perder la venta de las primeras variedades de mandarinas españolas, colapsar la campaña y provocar el mal desarrollo de la misma, influyendo negativamente en el precio y salida de las variedades de media estación, como las Clemenules".
Añadió que "la única mandarina que parece que se está salvado es la ecológica, pero de la convencional, que está en el punto óptimo de maduración para el corte en estos momentos, hay cero ventas”.
Afirmó que “de seguir esta tendencia estaremos ante la sentencia de muerte de las clementinas valencianas”.