Exportadores de ciruelas y nueces esperan cosecha normal para 2016 pese a fenómeno de El Niño
Luego de una primavera lluviosa y temperaturas inusualmente variables para la fecha, la industria podría haber esperado efectos adversos en las cosechas de ciruelas y nueces chilenas, sin embargo, el análisis de expertos anticipa que se dispondrá de cosechas normales si es que continúan las temperaturas regulares para la época.
“En el caso de Chile, el Niño no tendrá efectos adversos para nuestros frutos, lo que contrasta con otras zona del Pacífico”, planteó el presidente de Chilean Walnut Commission y vicepresidente de Chile Prunes, Andrés Rodríguez. El ejecutivo planteó que de acuerdo a análisis técnicos realizados por ambas asociaciones gremiales, los efectos han sido menores a los que se especulaban, por lo que la temporada marcha sin tropiezos.
En el caso del Ciruelo Europeo, éste se ha desarrollado de buena forma en las principales zonas productivas de nuestro país, a pesar de las condiciones de humedad e inestabilidad de las temperaturas. Esta temporada ha sido favorable para el desarrollo del cultivo, ya que no se registraron heladas importantes durante la floración ni tampoco temperaturas muy elevadas que afectaran negativamente la cuaja del ciruelo.
Sin embargo, hay factores que en cierto grado han modificado el crecimiento habitual de esta especie en las diferentes zonas de producción. Por un lado se ha tenido el efecto de un otoño cálido que retrasó la entrada en receso e incluso permitió la floración de algunas yemas durante este periodo. Esta situación se tradujo en un reposo invernal menos profundo, donde si bien la acumulación de frío fue adecuada en cuanto a Horas Frío bajo 7°C, la floración se vio atrasada y muy extendida, lo que sumado a que la evolución de las temperaturas no fue estable, generó diferencias en el desarrollo de la fenología. Por el lado de las temperaturas, a la fecha se observa una menor acumulación de Días-Grado, que alcanza en promedio un 10% en la Región Metropolitana y de un 13% menos en la Región de O’Higgins, pero es importante considerar que temporada anterior contó con alta acumulación de días grado. Si bien la temporada se encuentra en su etapa inicial, esta menor acumulación de DG podría verse traducida en un retraso de las fechas de cosecha respecto a la temporada anterior, pero dentro de las fechas normales de cosecha de ciruelas en nuestro país.
Para el caso de las nueces, la temporada avanza con un ritmo un poco más lento que la anterior, situación similar a la del resto de los cultivos frutales, los cuales se vieron expuestos a un otoño cálido, un invierno con baja acumulación de frío y una primavera donde las temperaturas no se han afianzado y las precipitaciones llegaron tarde a causa del fenómeno del Niño. Los efectos de esta condición se han podido observar a partir de los últimos días de agosto cuando la variedad Serr inició su brotación en la zona norte, evidenciando una brotación retrasada y en algunos casos irregular al igual que en la zona central. La floración por su parte también se vio retrasada y extendida, lo que significó que el periodo de polinización ocurrió bajo condiciones climáticas muy diversas, produciéndose diferencias en los estados de desarrollo incluso dentro de una misma planta, y expuestos a reiteradas precipitaciones y viento que afectaron en algunas zonas la coincidencia del polen.
No se han registrado heladas importantes, sólo algunos eventos particulares en la zona sur pero no de gran magnitud. Las precipitaciones ocurridas durante toda la primavera y en particular durante octubre, pusieron en alerta a los productores por el riesgo que existe que se desarrolle peste negra. Sin embargo, la respuesta vino rápidamente con la realización de aplicaciones preventivas incluso en la zona norte y centro, donde esta enfermedad no es habitual lo que ha permitido mantener controlada la enfermedad y solo se han visto algunos síntomas en el follaje en zonas más húmedas ubicadas hacia la costa.
Las temperaturas han evolucionado de manera lenta y esto se ve reflejado en una menor acumulación térmica, la cual presenta un déficit en los Días Grado (base 10°C) que alcanza un, 2% en la V región, un 10% en la RM, un 15% en la VI región, un 19% en la VII región y un 24% en la VIII región. Se espera que las condiciones climáticas se desarrollen de manera favorable y permitan el crecimiento de los frutos de nogal en las distintas variedades establecidas en nuestro país.