Argentina participa en la revisión de protocolos internacionales de diagnóstico de plagas

El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) participa en la revisión de Protocolos de Diagnóstico (PD) de plagas de interés agroalimentario, elaborados y aprobados en el marco de la Convención Internacional de Protección Fitosanitaria (CIPF) de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).

La CIPF elabora o revisa regularmente estos protocolos. Entre ellos, se encuentra actualmente en revisión el PD Nº 9 sobre el género Anastrepha de Mosca de las frutas, que son uno de los grupos de plagas más perjudiciales de la producción de frutihortícola a nivel mundial. El género Anastrepha es uno de los de mayor importancia, que cuenta con muchas especies cuarentenarias.

A partir de una convocatoria de la CIPF para proponer expertos internacionales para la revisión del PD Nº 9, en 2021 se propuso la candidatura de Ignacio Dumois, del Laboratorio Vegetal de referencia del Senasa, para formar parte del grupo que trabaje en la revisión del protocolo, quien fue confirmado para esta actividad, participando junto con expertos de EE.UU. y Vietnam.

Las funciones que realiza Dumois como analista profesional especializado en la determinación de insectos de importancia cuarentenaria para la Argentina, el Comité de Sanidad Vegetal del Cono Sur (COSAVE) y otros países, se encuadran en el marco del Sistema de Gestión de la Calidad, según Norma ISO 17025/2017. Es referente del Programa Nacional de Mosca de los Frutos para la detección y determinación de dípteros. Participa en la capacitación de inspectores, analistas de laboratorios y en auditorías de Laboratorios de la Red del Senasa.

Sobre los Protocolos de diagnóstico

Los PD describen los procedimientos y métodos para el diagnóstico oficial de las plagas reglamentadas pertinentes al comercio internacional. Brindan los requisitos mínimos para diagnósticos confiables de plagas específicas, indicando su posición taxonómica y los métodos para detectarla e identificarla.

Están destinados a ser utilizados por los laboratorios que realizan diagnósticos de plagas como parte de las medidas fitosanitarias, que involucra a su vez a los agentes encargados de fiscalizar la sanidad de plantas y derivados que se comercializan internacionalmente. Además, son de gran utilidad y apoyo para las organizaciones oficiales de protección fitosanitaria de los países dado que armonizan los métodos y procesos para la correcta identificación de las plagas que se regulan en el comercio internacional.