Producción de nogales: Proyectos más rentables como menos recursos
En los últimos 15 años Chile ha transformado el cultivo del nogal en una industria competitiva en el ámbito de la fruticultura nacional y es un producto que se exporta a todos los continentes.
La superficie de nogales (Juglans Regia), fruta originaria de Asia y Europa y llega a Chile junto con los españoles, hoy ya tiene en este país más de 46 mil hectáreas, es uno de los segundos frutales con más superficie plantada, y debido a la que el territorio tiene condiciones climáticas propicias, permite producir en contra estación hace que pueda abastecer a muchos países.
Sin embargo, los productores de nueces que van de Coquimbo a La Araucanía concuerdan en la necesidad de abrir nuevos mercados y durante Exponut enfatizaron en la necesidad urgente de trabajar en conjunto.
Durante el último encuentro de Exponut 2022 participó el experto en el cultivo de nogales, Miguel Carús, gerente técnico de Nogaltec Sur, quién explicó cómo se puede obtener mayor eficiencia en la producción de nogal y tener proyectos más rentables con menos recursos.
Antes de implementar un huerto deben ser consideradas y evaluadas las condiciones edafoclimáticas, para poder determinar si se cumplen o no las condiciones para un correcto desarrollo de la especie, junto a la disponibilidad de agua ya que el nogal es una especie que presenta una alta demanda y por eso el manejo del riego es fundamental para tener un buen rendimiento.
"En alta densidad es más eficiente el uso del agua (huella hídrica), de fertilizantes, fitosanitarios y recursos humanos por kilos de nuez producida. Al aumentar las producciones de las primeras cosechas no disminuye la calidad de las nueces, son equivalentes a los huertos convencionales de segunda y tercera hoja, respectivamente, si el manejo de riego y nutrición se realiza de acuerdo con la cosecha objetivo", dice Miguel Carús, gerente técnico de Nogaltec Sur.
Carús señaló que la alta densidad o el calibre en general dependen de las reservas nutricionales, del estado vegetativo y productivo que tuvo la planta en la temporada anterior, la homogeneidad de brotación, floración y su concentración en el tiempo, lo cual afecta directamente la cuaja y la distribución de calibres.
Dice que cuando se opta por una cantidad de plantas de entre 500 y 800 plantas por hectárea, la poda de producción debe enfocarse en controlar la luminosidad y en renovar de forma constante los centros productivos de cada árbol.
Explica que el uso de reguladores de crecimientos es fundamental para evitar el emboscamiento, siempre que se considere bien la realidad fitosanitaria del huerto, por ejemplo analizar bien si el huerto está estresado o en condiciones que no óptimas.
Para lograr formar un huerto de nogal con altos rendimientos productivos, se debe considerar no sólo una correcta preparación del suelo, sino que también elegir y diseñar agronómicamente nuestro sistema de riego, el que debe ser capaz de satisfacer el requerimiento hídrico del huerto en máxima demanda.
Finalmente para un correcto diseño agronómico del sistema de riego se debe:
- Conocer el requerimiento hídrico del cultivo
- Realizar una evaluación física del suelo
- Elección del sistema de riego