Los alimentos orgánicos dan la pelea

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Los alimentos orgánicos dan la pelea

Son más caros que los tradicionales pero han logrado captar fieles consumidores. ¿Qué pasaría si bajaran sus precios y no existiera diferencia con los productos tradicionales? En Estados Unidos el valor de las manzanas orgánicas cae. En paralelo, su buena fama crece día a día.

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Fotografía: www.inta.gov.ar

Hace unos años, los productos orgánicos eran una extravagancia de las elites. Hoy, el consumidor está más informado y se ha mostrado proclive a cuidar su alimentación y el medio ambiente. Exige este tipo de productos y el mercado se los está dando.

El gerente de la Agrupación de Agricultura Orgánica de Chile, AAOCH, Ligio Alarma, señala que en el mundo hay 60 millones de hectáreas totales de producción orgánica y 31 millones para cultivos. En Chile la superficie orgánica certificada es de 170 mil hectáreas. El gremio actualmente trabaja en un Directorio Agrícola, para conocer en detalle producción, ventas e incluso la ubicación de los terrenos en el país. La mayor parte de la producción es exportada.

En México, el 80 % de los productos se exporta a Estados Unidos, Europa y Asia, cuentan Erika Schlebach y Raúl Moreno de Desarrollo de Nuevos Productos y Aseguramiento de Calidad, Aires de Campo de México. El país ocupa el primer lugar en exportación mundial de miel y el tercero de café.

Según estos representantes, “Australia y Nueva Zelanda están en crecimiento principalmente en cultivos de cereales y leguminosas, además en productos terminados como vinos, conservas, frutas frescas como kiwi, y creemos que se están enfocando en la exportación”.  En el Cono Sur de América, mencionan a Argentina, Chile y Brasil como los mercados de mayor crecimiento sobre todo en cultivos básicos como azúcar, aceites, vinos y frutas.

Pedro Landa, experto argentino y Director Técnico de OIA, describe la situación actual de los productos orgánicos en el Hemisferio Sur: “Está existiendo una demanda en creciente aumento, incluso mercados importantes como el de Brasil van a contar a partir del año que viene con su propia Norma Orgánica para su Mercado Interno. Chile, que cuenta con una legislación desde 2007, ha firmado Acuerdos Comerciales para exportaciones de productos orgánicos a EEUU y Japón”.

No obstante, el factor precio sigue siendo una barrera para su masificación. Los orgánicos han sido históricamente más caros en distintos porcentajes, en algunos casos, cuestan el doble. Para Pedro Landa, “no se pueden comparar uno con otro sólo por el precio, esa simplificación no debería ser aceptada por ningún productor, procesador ni consumidor orgánico”. El experto agrega que al decir que el orgánico es más caro “se aplica un criterio convencional para un sistema de producción que es totalmente diferente”.

Según dice “el campo de juego no está nivelado sino inclinado a favor de productos convencionales, en los subsidios directos e indirectos”.  Y agrega que además “están relacionados con sistemas productivos que no son sostenibles y que causan costosas consecuencias medioambientales y para la salud”.

Por su parte, Ligio Alarma observa que los fieles consumidores orgánicos están contentos con el dinero que invierten. “Es un consumidor leal, orgulloso de su conocimiento, de su esfuerzo y tipo de alimentación”, señala.

¿Caen los precios?

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Fotografía de portada: www.inta.gov.ar

Pero este factor de mayor precio podría cambiar. De hecho, según consigna un artículo del blog  Refresh el valor de las manzanas en el estado de Washington, donde se produce el 70% de ese fruto en el país, tendería a la baja.

“Es bastante esperable y es una lógica que se sustenta por la mayor oferta de producto. También tiene que ver con que las cadenas de supermercados se están metiendo fuerte y llevan a cuesta una competencia por precios. En el supermercado el precio tiende a competir y por ende a la baja”, opina Ligio Alarma.

Erika Schlebach y Raúl Moreno  señalan que por ejemplo en México tienen situaciones detectadas que influyen directamente en el precio, como por ejemplo, la inversión de los productores en maquinarias y tecnología, lo que ayuda a reducir los costos.

Otros aspectos que mencionan son los altos costos de certificación de empresas extranjeras. “En cuanto la ley nacional avance, los costos bajarán debido a la competencia y otros esquemas de certificación”. Destacan también los bajos volúmenes de venta, por exportación. “Al incrementarse los volúmenes nacionales se reducen costos de producción y se optimizan recursos como almacenaje, transporte y distribución”.

Agregan la mayor importación y competencia y las políticas institucionales: “En la medida que el gobierno impulse leyes, fomente el consumo y facilite los tramites de exportación, créditos, capacitación las empresas serán más eficientes y podrán bajar los costos”

¿Y qué decisión tomarían los consumidores si orgánicos y tradicionales llegaran a costar lo mismo? “En una situación hipotética como tal, creo que cualquier consumidor optaría por adquirir productos orgánicos, ya que de esta forma estaría contribuyendo con su aporte a la sustentabilidad del planeta y de sus recursos, y estaría consumiendo productos confiables, conociendo el origen de los mismos”, indica Pedro Landa.

“El consumidor sin duda elegirá los productos ecológicos ya que se hace más exigente y conciente del origen e ingredientes de los productos que adquiere”, señalan los representantes mexicanos.

Existe mucha preocupación, añaden, por el incremento de la comida chatarra. “Todo por  el incremento de enfermedades como la diabetes, cardíacas, metabólicas, todas originadas por sobrepeso y malos hábitos de alimentación. Esto llevará a que finalmente identifiquen a los orgánicos como una de las alternativas de consumo saludable”.

¿Y qué pasaría si los productos orgánicos llegan a ser más baratos que los tradicionales? “Eso yo lo experimenté hace más de 6 años y también este año en el mercado inglés. Me tocó ver cómo habían crecido especialmente en los supermercados, daba gusto ver tanto producto orgánico. Aunque creo que estas situaciones son todavía excepcionales”, señala Ligio Alarma.

Para el Ingeniero Agrónomo y Comercial de la Universidad de Chile, Rolando Chateauneuf, la baja en los valores de los orgánicos no debería suceder en forma persistente. “Se daría circunstancialmente durante un lapso breve, ya que si los precios bajan se tenderá a consumir más de ellos, por lo tanto se ampliarán sus mercados, crecerá la cantidad demandada. Al bajar el precio de los orgánicos, tenderá a bajar su producción y ello originará nuevamente alzas de precios”, asegura.

IMG 7644 copia 31Añade que “en el largo plazo los precios tienen que estar relacionados con los costos de producción, los que estimo siempre serán más altos en los cultivos orgánicos, ya que en éstos se deben obtener menores rendimientos, están afectados por plagas que son menos controladas en los orgánicos al no poder usar una gama amplia de pesticidas. Además las limitaciones en el uso de fertilizantes químicos contribuyen a que los rendimientos por superficie sean menores”.

Y ejemplifica con el kiwi: “Sus precios iniciales fueron muy altos lo que motivó un fuerte aumento de la producción mundial. Debido a esto último sus precios bajaron, lo que motivó que se arrancaran plantaciones a pesar de que su demanda mundial aumentaba. Después los precios volvieron a subir”.

¿Cómo ven el futuro de los productos orgánicos? “El consumidor es el motor del cambio” sostienen Schlebach y Moreno. “Debemos informar a los consumidores sobre los procesos, origen y composición de los alimentos, y se deben impulsar políticas públicas que fomenten y promocionen los beneficios de una alimentación saludable”, explican.

“Este no es una problema aislado, está integrado con otros que tienen su efecto en el clima, la ecología, el rescate de la biodiversidad, la sustentabilidad, el desarrollo regional y la educación”, asevera desde México.

El gerente de AAOCH responde: “ha habido tanto interés en un año y medio a la fecha, la gente comenta mucho. Hay mucho productor y se podrían meter muchos chicos, por lo que se podría crecer muy rápido”, sostiene

Según dice, el sector ha vivido un largo período de “incubación”, por lo que este “botón” pronto va a florecer. Cuando eso pase, visualiza bajas de precios y un aumento en el rango de productos: “Esto va a pasar luego, dentro de los próximos cinco años de todas maneras”, concluye.

Fuente: www.videlabs.com/portalf

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