¿Cuando hay que podarlo? ¿Qué técnicas debemos utilizar? Una de las razones más importantes en la poda del membrillo es incentivar la producción del fruto.
- Controlar el desarrollo del árbol.
- Mejorar la cantidad y calidad de la cosecha.
- Favorecer la iluminación y aireación en la copa y en el interior del árbol.
- Eliminar las ramas viejas que puedan albergar parásitos, así como las ramas secas, rotas o dañadas.
Los membrillos jóvenes se podan los primeros años para determinar su forma. Darle forma al árbol es vital ya que puede afectar a la cantidad y calidad de la cosecha, la facilidad para cogerla y otras actividades agrícolas. Los membrillos maduros se podan para conservar su forma y para despejar la parte interior del frutal, esto hace que la luz del sol penetre y mejore la aireación. Todas estas operaciones son beneficiosas para la producción del fruto en el futuro. La poda del membrillo maduro se realiza anualmente o cada dos años.
No hay una norma escrita sobre cómo podar un membrillo y realizar una buena poda dependerá, por lo general, de la pericia del podador. Sin embargo, existen algunos criterios generales que debemos conocer y seguir para podar membrillos y hacerlo correctamente.
Lo primero que tenemos que tener en cuenta a la hora de planificar la poda de membrillos, son las heladas. El membrillo, al igual que los demás árboles frutales, sufre daños en sus tejidos si se producen heladas tras haber sido podado. Por lo tanto, siempre que se pronostiquen bajas temperaturas (cercanas a 0º), tendrás que posponer la poda hasta que se reduzca el riesgo.
En consecuencia, deberemos planificar la poda para hacerla coincidir con el periodo de menor actividad y crecimiento del árbol.
Por lo general, el mejor momento para podar los membrillos es a principios de la primavera, antes de que el árbol recupere su actividad y siempre que no exista riesgo de heladas. Esto permitirá una menor pérdida de savia, y como es una fecha cercana a la fase de crecimiento las heridas cicatrizarán pronto. En caso de climas con inviernos poco fríos, la poda en otoño puede ser una buena opción.
Si bien las podas importantes como pueden ser las de formación, producción o renovación deben realizarse en temporadas frías, no pasa lo mismo con la poda verde. Un buen momento para esta última es a principios o mediamos del verano, es decir la época en la que hace más calor.
Para podar membrillos vamos a necesitar una serie de herramientas, dependiendo de las dimensiones del árbol y el tipo de poda. Esta es una lista de algunas de las herramientas que debemos utilizar:
- Tijeras de podar. Hay de varios tipos: Tijeras de podar de una mano, con la que podremos cortar tallos de hasta 2,5 cm de diámetro, y son más recomendables para podas en verde. Y las tijeras de dos manos, con las que podremos cortar ramas de hasta 5 cm de diámetro.
- Sierra. Se utilizan para serrar ramas de entre 5 y 20 cm de diámetro. Para las ramas más grandes y los troncos, vamos a necesitar una motosierra.
- Motosierra. Se usa para cortar troncos gruesos de más de 20 cm. Existen motosierras eléctricas que funciona con batería o con cable de alimentación, y motosierras de gasolina. Estas últimas son más potentes.
- Podadora de altura. Se llaman así a las tijeras, sierras o motosierras con mangos telescópicos que permiten llegar a las ramas más altas. Con estas herramientas podemos cortar ramas a una altura de unos 5 o 6 m.
- Escalera de tijera. Es importante cumplir las normas de seguridad y no ubicarse en lo alto de la escalera haciendo equilibrio. Recuerda que debes colocarte unos escalones más abajo y que la cintura no debe sobrepasar el último escalón. Las caídas en altura son peligrosas en este tipo de tareas.
Elementos de seguridad como guantes, gafas, botas... No olvides protegerte y trabajar de forma segura.
Es recomendable desinfectar las herramientas de corte antes de la poda, esto ayudará a prevenir enfermedades en los frutales.
Lo primero que tenemos que conocer a la hora de podar un membrillo es el tipo de poda que vamos a hacer y para eso tenemos que conocer la edad del árbol. Si el membrillo es joven optaremos por una poda de formación, más orientada a establecer la estructura del árbol. Si, por el contrario, es maduro, llevaremos a cabo una poda de producción, orientada más a la producción y a facilitar la recogida del fruto.
Como hemos comentado, no es lo mismo podar un membrillo joven que uno maduro. Pero, ¿Cuándo se considera que un membrillo pasa de joven a maduro? La respuesta es relativa, ya que dependiendo de factores como el clima, la zona o la variedad, los árboles pueden envejecer de formas distintas. Para hacernos una idea, se puede decir que un membrillo alcanza la madurez entre los 5 y los 10 años.
Las podas durante esta fase se realizan para guiar el crecimiento del árbol. A continuación vamos a ver los tipos de poda que debemos realizar:
Se hace para establecer la estructura principal del árbol y dirigir su crecimiento. Como es una poda bastante drástica, se realiza cuando el árbol está en reposo, es decir, en otoño o a finales de invierno.
La poda de formación se hace de la siguiente forma:
- En el 1er año, se deben podar todas ramas del membrillo. Así, brotarán ramas más bajas.
- En el 2º año se recortarán un poco las ramas principales, a 2/3 de su longitud. Las ramas que broten desde la mitad inferior del tronco las quitaremos y las demás las dejaremos.
- En el 3er año podamos las ramas principales a 2/3 de longitud, y quitamos las ramas que vayan creciendo hacia dentro de la copa del árbol.
Este tipo de poda se realiza con el objetivo de establecer las ramas principales productivas.
En esta poda elegiremos las 3 o 4 ramas principales que queremos que sean la estructura del árbol. Estas ramas no deben tener demasiada inclinación, ya que así evitaremos que en el futuro se rompan por el peso.
A continuación, podaremos los chupones que salgan de estas ramas y las recortaremos un poco, dejando definida la estructura del árbol.
La poda de un membrillo maduro se hace para conservar su forma y despejar la parte interior del árbol. De esta forma, mejoramos la aireación y favorecemos la entrada de luz. Se denominan podas de producción, y durante esta fase también podemos realizar podas en verde y podas de rejuvenecimiento. Vamos a ver de qué se trata:
Este tipo de poda se realiza para aprovechar la cantidad de luz solar captada por la copa, además de mantener su forma, con el fin de mejorar la calidad y cantidad de la cosecha.
Se trata de una limpieza y aclareo de las ramas, con el fin de facilitar la entrada de luz para beneficiar al fruto. Son preferibles las copas lobuladas, antes que las esféricas, ya que así aumentamos el área de exposición, aprovechando al máximo la luz. Además, podaremos también las ramas poco productivas y las que crezcan hacia el interior de la copa del árbol.
En definitiva, lo que se busca con la poda de producción es mejorar el rendimiento del árbol y mejorar así su producción.
- En primer lugar eliminaremos los chupones más grandes, ya que son poco productivos y frenan el correcto desarrollo de la rama.
- No debemos eliminar todos los chupones, sino que se deben dejar los más débiles situados en el interior del árbol para sombrear las maderas que conforman la estructura del membrillo.
- Debemos cortar las ramas más bajas, ya que son las que reciben menos iluminación y, por lo tanto, producen los frutos de peor calidad.
- Es recomendable que la copa tenga una forma lobulada, con muchos entrantes y salientes para aumentar así la exposición y conseguir un mejor aprovechamiento de la luz solar. También podaremos las ramas entrelazadas del interior de la copa, así como aquellas que estén dañadas, rotas o enfermas.
No deben realizarse aclareos excesivamente intensos de ramas finas, para mantener la relación hoja/madera. Evitaremos así el exceso de madera, que reduce la capacidad de renovación de las ramas productivas.
Vamos a repasar los tipos de poda vistos hasta ahora con esta infografía:
La poda de rejuvenecimiento, o poda de renovación, se realiza en membrillos con más de 20 años, con indicios de envejecimiento, después de haber estado produciendo muchos años. Estos síntomas pueden ser baja producción y de peor calidad, pérdida de follaje en el interior del árbol, hojas más pequeñas y de color amarillento.
Se trata de una poda drástica, para rejuvenecer el membrillo, aunque también se puede hacer de forma progresiva.
Poda drástica de rejuvenecimiento: en el primer caso lo que hacemos es eliminar todo el follaje del árbol, dejando prácticamente la base del tronco y las ramas principales para que vuelvan a crecer.
Poda progresiva de rejuvenecimiento: consiste en ir podando desde lo alto de la copa hasta la base de las ramas. Se hace por fases, cada 3 años iremos cortando una de las cuatro ramas principales del ábrol.
En verano se pueden realizar podas de renovación o podas en verde.
Aunque se pueden llevar a cabo en cualquier época del año, lo normal es hacerlas a finales del mes de agosto, cuando el membrillo apenas tiene actividad a causa de las elevadas temperaturas.
Se hace para controlar el crecimiento de los chupones o retallines, eliminando los que no son aprovechables para el membrillo.
Una vez terminada la poda, no ha acabado todo el trabajo; nos falta deshacernos de los restos de ramas. Pero ¿Qué hacemos con ellos?... Bien, tenemos varias opciones:
- Utilizar una trituradora de ramas. Las biotrituradoras nos facilitan mucho la vida. Además es lo ideal para el cultivo, ya que el material triturado se extiende y enriquece el suelo de materia orgánica. Hoy en día existen en el mercado trituradoras de ramas para uso doméstico al alcance de cualquier bolsillo.
- Quemar las ramas. Para ello tenemos que pedir un permiso en el ayuntamiento que corresponda. Hay días en los que no está permitido hacer fuego, por lo que debemos informarnos previamente y pedir los correspondientes permisos.
- Hacer leña para estufas, hornos, chimeneas...en zonas permitidas. Para ello hay que preparar los restos de ramas y troncos, cortarlos en tacos y hacer trozos más pequeños, deshaciéndonos de las hojas, las cuales esparciremos por el cultivo. También se puede vender esta madera, por ejemplo a negocios que requieran un horno de leña, como panaderías, pizzerías.
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