Productores de avellano europeo conocen enfermedad bacteriana por medio de hongos endófitos
Con la finalidad de dar a conocer una alternativa de control biológico del tizón del avellano que reemplaza las tradicionales aplicaciones de productos fitosanitarios en base a cobre, utilizados por décadas por los productores, investigadores de INIA Quilamapu organizaron para este jueves 12 octubre una instancia de capacitación en terreno denominada “Día de Campo de estrategias de manejo biológico del tizón bacteriano en avellano europeo”.
Esta actividad, prevista para las 10:00 horas, en el Fundo San Gerónimo, camino a Frutillar Sur de Coihueco, cobra gran relevancia para productores y asesores del rubro, no solo por tratarse de una opción de control de la enfermedad que es sostenible en el tiempo y ambientalmente amigable, sino también por tratarse de un metodología que actúa como probiótico que fortalece la inmunidad de los árboles y los prepara para enfrentar, de mejor manera la primavera, época de proliferación de las enfermedades.
Según indica la investigadora de INIA Quilamapu, Lorena Barra, la aplicación preventiva y curativa de hongos endófitos requiere de ciertos resguardos, entre los que se cuentan la baja radiación solar, temperaturas moderadas y una humedad superior al 50%, condiciones en las que las cepas de hongos actúan como probióticos en la planta, aumentando la resistencia ante plagas y enfermedades. De igual modo, explicó que la planta incrementa la tolerancia a la falta de agua o estrés hídrico y, lo que es muy significativo, promueve el crecimiento de la misma. “La idea no solo es atacar la bacteria de Xanthomona, sino que aumentar la inmunidad de la planta de avellano europeo”, sentenció.
En el mismo sentido, el profesional Daniel Ortiz señaló que la bacteria se encuentra normalmente en el ambiente, y cuando existen las condiciones de alta humedad y de temperatura, la bacteria Xanthomona se multiplica, siendo necesario hacer aplicaciones preventivas de los hongos endófitos tanto en otoño, de manera de bajar la población de la enfermedad, como en primavera, momento en el que se inicia la brotación.
Según datos proporcionados por CIREN, en 2022 la superficie nacional alcanzaba a las 36 mil 400 hectáreas de avellano europeo, mientras que en la región de Ñuble se sobrepasaban las 6 mil 600 hectáreas, lo que representa el 18% de la superficie nacional. La comuna con más presencia en la región es Ñiquén con 1.700 hectáreas, seguida de Bulnes con algo más de 1.160 hectáreas. La meta esperada por el sector para 2030 es contar con 60 mil hectáreas en todo el país.
El Día de Campo se enmarca en el proyecto "Biocontrol en avellano europeo con endófitos", iniciativa financiada por el Gobierno Regional de Ñuble y que ejecuta INIA.
Entre otros, se tratarán temas como el “uso de hongos endófitos para el control del tizón del avellano europeo”, “sintomatología en huertos de avellano europeo causada por la bacteria del tizón” y “la aplicación de hongos endófitos (Endomix) para el control del tizón del avellano europeo”.