El amoníaco es un componente fundamental en la producción de fertilizantes, esencial para la mitad de la producción alimentaria mundial. Tradicionalmente, su síntesis ha requerido un proceso altamente contaminante, responsable de cerca del 1.8% de las emisiones globales de CO2. No obstante, un reciente avance tecnológico promete revolucionar este sector mediante la producción local de amoníaco sin emisiones, directamente en las granjas.
El proceso convencional de producción de amoníaco involucra supercalentar agua, aire y gas natural bajo presión, lo que resulta en una considerable emisión de dióxido de carbono. Esta técnica no solo es perjudicial para el ambiente, sino que también centraliza la producción en unos pocos países, aumentando la dependencia y vulnerabilidad de muchas regiones a fluctuaciones de disponibilidad y precio.
La startup NitroVolt, surgida como una escisión de la Universidad Técnica de Dinamarca, ha desarrollado el «nitrolyzer», una máquina del tamaño de un contenedor capaz de producir amoníaco utilizando únicamente agua, aire y electricidad renovable. Esta tecnología, fruto de siete años de investigación en síntesis electroquímica de amoníaco, no emite carbono durante su operación y se perfila como un cambio de paradigma en la industria.
El sistema final solo requerirá aire, agua y electricidad verde para sintetizar amoníaco sostenible y descentralizado directamente en el punto de uso.
Las unidades del tamaño de un contenedor pueden colocarse en la granja, invernadero o instalación generando el amoníaco necesario según la demanda. La tecnología es fácilmente escalable para adaptarse a las necesidades de cualquier granja.
Recientemente, NitroVolt ha logrado asegurar una ronda de financiamiento pre-semilla de €750,000, otorgada por el fondo sueco BackingMinds. Con este nuevo capital, la empresa planea expandir su tecnología y salir del ámbito universitario para comercializar su invento. Este respaldo financiero es un paso crucial para la transición hacia una producción de fertilizantes más sostenible y menos centralizada.
El sistema «nitrolyzer» está diseñado para operar directamente en las granjas, requiriendo solo acceso a la red eléctrica y suministros básicos de agua y aire. Este sistema puede integrarse al sistema de riego existente para administrar el amoníaco directamente sobre los cultivos, ajustando la concentración necesaria para cada aplicación específica. Esta capacidad de producción local no solo reduce la huella de carbono, sino que también mitiga los riesgos asociados a la volatilidad de la cadena de suministro global.
La demanda de amoníaco se prevé que triplique para 2050, año en el cual la industria debe alcanzar emisiones netas cero. Con estos desafíos en el horizonte, tecnologías como el «nitrolyzer» se posicionan como soluciones clave para un futuro más verde. Además, el amoníaco tiene el potencial de ser utilizado como combustible de cero carbono para el transporte, abriendo aún más las puertas a innovaciones sostenibles.
La tecnología «nitrolyzer» de NitroVolt no solo promete reducir las emisiones globales, sino también democratizar el acceso a nutrientes esenciales, redefiniendo así la industria del amoníaco para las futuras generaciones.
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