Tras la declaración de Emergencia Preventiva anunciada entre las regiones de Coquimbo y Ñuble ante la llegada del sistema frontal en estas zonas, el ministro de Agricultura, Esteban Valenzuela, se trasladó a la región de Coquimbo para monitorear el estado de la situación.

El secretario de Estado, quien ya había estado en la zona esta semana para participar del catastro agrícola y entregar ayuda a agricultores de Limarí, participó en un Cogrid Regional junto al Delegado Presidencial Regional, Galo Luna, para coordinar acciones preventivas ante la llegada de las lluvias que ya han afectado gravemente la región del Biobío.

“Estas lluvias son muy peligrosas para las zonas altas, no solo de la cordillera de Los Andes, sino también de la cordillera de la Costa y de los valles centrales, y por eso, reiterar el llamado a los y las agricultoras para que saquen los animales del borde de los ríos: hay que confinar en establos y gallineros en estas horas”, dijo.

Asimismo, sostuvo que “lamentablemente para la región de Coquimbo y Valparaíso, el pronóstico de isoterma es en los 3.500 a 4.000 metros de altura, por tanto, la posibilidad de un daño muy significativo en estas zonas cordilleranas altas es muy grande”. Además, la autoridad hizo un llamado a “no ser porfiados (sic) y pedirles que por favor bajen a zonas seguras, que quienes están en viviendas de laderas muy frágiles concurran donde vecinos o familiares”.

La declaración de Emergencia Preventiva anunciada por la vicepresidenta de la República, Carolina Tohá, permite anticiparse a la hora de tomar decisiones, antes de eventuales daños. De este modo, se agiliza la ejecución de las tareas, contrataciones y compras. “La agricultura es resiliente, el gobierno les ha ayudado con capital de trabajo y crédito y estamos preparados para soportar bien esta emergencia en colaboración con los otros Ministerios”, añadió el titular de Agricultura.