Portalfruticola.com conversó con el director de México Table Grapes y de la Asociación de Productores de Uva de Mesa de Sonora, Sergio Lugo, explicó que finalizaron la temporada con un total de 22.7 millones de cajas en el mercado de exportación y alrededor de casi 5 millones en mercado nacional. "Es un poco menor al rendimiento que tuvimos el año pasado, la baja se debe a temas de comercialización, producción y factores climáticos”, aclaró.
Desde el punto de vista climático, señaló que la industria enfrentó altas temperaturas en el área de Sonora, sumado a que también existe una escasez de agua, “ya que estamos viviendo una crisis hídrica en todo el país, provocando que la producción no fuese la ideal”.
Respecto a la calidad y producción de la fruta, explicó que desde la semana 19 a la semana 31, presentaron algunos inconvenientes con los calibres, situación que no afectó tanto los grados Brix, “pero en nuestro peak, que fue la semana 21 a la 26, tuvimos bastante uva, con calidad, tamaños y con los Brix que en el mercado demanda”.
Consultado sobre las variedades que destacaron en la temporada, Lugo fue sincero al decir que actualmente la industria se encuentra trabajando en la migración a nuevas variedades, pero no con el porcentaje que tienen en Chile y en Perú.
Agrego diciendo que “este año pudimos tener el 55% de toda nuestra producción de nuevas variedades. Por lo que el incremento se dio más que nada en Mid Greens y una disminución en Flame”.
Observando la radiografía de lo que fue la campaña de uva de mesa, el director de México Table Grapes comentó que a inicios de la campaña, en la semana 19 a la 21 aproximadamente, tuvieron poco volumen. “En el mes de abril y mayo no tuvimos la producción de años anteriores, debido al cambio climático”, dijo.
Detalló que en campañas anteriores tenían en promedio medio millón de cajas al 15 de mayo, pero desde el año pasado y este año tuvieron una disminución considerable.
Con una mirada más global, Lugo explicó que el cambio varietal es el gran desafío del sector: “Es totalmente primordial seguir incrementando el porcentaje de nuevas variedades en nuestras hectáreas. Hay variedades muy buenas, productivas y que también nos van a dar un rendimiento mayor al que esperamos en la actualidad”.
En ese sentido, argumentó que las principales variedades que están plantando “son Mid Greens, una variedad que ha tenido éxito y también tenemos algunas hectáreas de Mid Reds, que también han tenido una gran aceptación de nuestro clima y del mercado. Entonces creo con estas variedades tenemos una gran área de oportunidad”.
Dijo que hoy en día, las principales variedades cultivadas son Flame, Early Sweet, Sugar One, luego Sweet Globe, Sugar Drop, Sweet Celebration y todavía tienen algo de Prime.
Consultado sobre el recambio varietal, fue claro al decir que debería estar creciendo alrededor del 10 al 15% mínimo, teniendo un máximo de 20% anual. “Esperamos contar con un porcentaje ya muy significativo de nuevas variedades y estar cerca del 70-80% en unos dos años”.
Analizando los mercados de destino de la uva mexicana, Lugo explicó que Estados Unidos representa cerca del 75%, luego viene Canadá. Le siguen países como Japón, Corea del Sur y algunos de América Latina.
Destacó que se encuentran trabajando en protocolos fitosanitarios con países como Tailandia, Taiwán y Filipinas. “Creo que si no es en esta temporada, en la siguiente podremos enviar fruta”.
En cuanto a Corea del Sur, comentó que han tenido un incremento en la demanda y que ahora están trabajando junto a los inspectores de Malasia, quienes visitaron México y "estamos próximos a firmar el protocolo".
"Proyectamos que podríamos exportar en un futuro de 2 a 4 millones de cajas, pero la proyección es empezar con 500.000 cajas e ir incrementando”.
Los desafíos son múltiples y la industria los debe enfrentar temporada a temporada, pero para el director de la Asociación de Productores de Uva de Mesa de Sonora, el país azteca está viviendo una crisis hídrica como nunca antes vista. Esto ha dado pie a que muchas áreas de la agricultura en el país estén viendo una crisis tanto productiva, como comercial.
En el caso de la uva, dijo que las variedades nuevas son importantes tanto para el mercado como para las condiciones de cosecha. "Estamos trabajando en estar a la vanguardia en este tema. Tenemos que mejorar en cuanto al rendimiento y la calidad de nuestra fruta con respecto al tema climático”.
Desde el punto de vista comercial, expuso que a inicios de la temporada pasada tuvieron precios muy altos, pero era porque Chile no estuvo presente en marzo y abril del 2023, “entonces, al momento de entrar la fruta mexicana, tuvimos precios arriba de 40 dólares. Este año no fue así, ya que venía un precio promedio de alrededor de 26 a 28 dólares y eso no dio pie a que la uva tuviera un precio muy alto a inicios de la temporada, sino que estuvieran en un precio promedio. Este año, sí se observó un balance en alrededor de los 24 a 21 dólares a mitad de la temporada, lo que nos ayudó fue el tipo de cambio”.
Lugo quiso enviar un mensaje al sector, colocando énfasis en la evolución en la cual se encuentra trabajando México. “Seguimos trabajando en mejorar tanto nuestras variedades, como las condiciones en las cuales presentamos nuestra fruta; estamos trabajando en estos retos”.
Abordó un tema relevante para la industria productora de uva de mesa, que tiene relación al incremento del consumo y dijo que “al final del día, la uva no se identifica como país, sino que como un producto en sí, entonces tenemos que seguir luchando para que exista una mayor homogeneidad y la calidad de la fruta con los países productores, como es Chile y Perú”.
