Perú se ha convertido en el segundo mayor exportador de palta en el mundo. Pese a estar en una posición destacada, los desafíos que tiene el sector están en la vorágine del cambio, ya sea por las condiciones climáticas que han alterado la calidad, condición y calibre de la fruta.

Debido a la importancia que tiene el sector, Fluctuante desarrolló un webinar dedicado a la fruta, instancia en la que se analizó el sector con una mirada al pasado, presente y futuro de la producción de palta peruana.

En ese contexto, el gerente general de Proserla, Alonso Puga, comentó su experiencia, los retos que ha enfrentado y las tendencias de la campaña 2024. Detalló que la empresa posee 250 hectáreas de uva de mesa, 180 de palta y 75 de lima Tahití. En el caso de la palta, muchas de las hectáreas surgieron de la reconversión de plantaciones de mango.

Puga recordó que 2023 fue un año atípico, golpeado principalmente desde marzo con la aparición del fenómeno del Ciclón Yaku, el cual generó lluvias y destrucción por las inundaciones.

“Las temperaturas comparadas entre los años 2022, 2023 y 2024 llegaron entre 4 a 5° C por encima de lo que puede ser un promedio normal. Por lo que tenemos una mayor radiación y evapotranspiración propia de las temperaturas y por el tema de la lluvia existe una mayor humedad relativa, concentrado en las zonas en la época de cosecha, específicamente en Lambayeque” dijo Puga.

Agregó que a nivel de industria, en la campaña 2023-2024, obtuvieron fruta con calibres más grandes.

Asimismo, el gerente general de Proserla, analizó la floración de lo que fue la campaña 2023-2024 mirando el diferencial en las temperaturas mínimas. "Las flores se expandieron, el 75% más o menos. Las altas temperaturas de 2024, entre febrero y marzo, fue un clima totalmente diferente al de la campaña pasada, donde hubo nubosidad por el tema de las lluvias y hubo alta humedad relativa; vemos que las flores tardías detuvieron su crecimiento y creo que eso impactó fuerte en la producción y en los rendimientos de los campos de la zona norte del Perú”, señaló.

Dada las condiciones climáticas, el líder de la empresa dijo que, al ver que la fruta no estaba creciendo en Hass, “tuvimos que tomar ciertas decisiones, como proteger la temperatura del suelo, para tratar de darle ese clima tropical que le gusta a la planta, para que estimule el crecimiento y favorezca al desarrollo de frutos”.

Fue claro al decir que la industria viene golpeada de años anteriores, “por lo que tenemos que ser resilientes, tratando de salir adelante con lo que tenemos y buscando nuevas formas de llevar nuestra producción adelante y hacerla sostenible”.

Puga recomendó mantener el suelo vivo, “por lo que cultivamos nuestro pasto verde para biomasa y producimos nuestro propio compost con el que atendemos 20 toneladas por hectárea al año”.

A juicio de Puga, este año está siendo bastante neutral comparado a la temporada 2022-2023 en los factores climáticos, “pero dadas las condiciones de sequía de la zona, es posible que volvamos a tener un verano con altas temperaturas y baja humedad relativa, por lo tanto, hay que cuidar mucho la temperatura del suelo, evaluar y poner cobertores vegetales, para que los cambios de temperatura no sean tan violentos en el suelo y las raíces no se inactiven”.

Producción y exportación

La mirada del gremio fue presentada por Arturo Medina, gerente general de la Asociación de Productores y Exportadores de palta Hass del Perú (ProHass), quien puso énfasis en que el país es el segundo exportador mundial de palta y el principal proveedor de la fruta en Europa.

Detalló que “actualmente en Perú tenemos cerca de 75.000 hectáreas y el crecimiento se debe a que ha habido un ingreso de muchos agricultores que no estaban registrados, que en su mayoría son muy pequeños. En 2023 teníamos 19.000 productores de palta Hass que tenían menos de una hectárea".

Noticia relacionada: Palta peruana finaliza temporada con la incorporación de pequeños productores

Expuso que uno de los desafíos que tienen los productores de palta es el cadmio. "Es muy delicado, al cual tenemos que prestar mucha atención y la única manera de poder protegernos en este momento, es hacer los análisis correspondientes de metales pesados; si tienen cerca de 0.5% no exporten a Europa, busquen otros destinos”.

Medina enfatizó que en el caso de exportar de todos modos, les puede traer grandes problemas y uno de esos es que cierren el mercado de Europa, donde se va el 60% de la fruta peruana: “Tenemos que actuar con responsabilidad”.

Mercados

El gerente general de ProHass comentó que la distribución de palta en el país se encuentra principalmente en La Libertad, donde existen cerca de 17.000 hectáreas, Lima con 12.000 hectáreas e Ica y Lanbayeque unidas, representan el mayor hectareaje en el país, con 25.000 productores en 2023.

Respecto a los envíos, Medina explicó que la baja se ha observado principalmente en Estados Unidos (-12%), seguido de Europa (-7%), en lo especifico, explicó que Países Bajos, Inglaterra y Francia han tenido una disminución entre un 10 a un 15%, Chile (-4%), China (-31%), Japón (-29%) y otros mercados (-15%). Caso contrario es lo que ha pasado en España, con un alza de un 23%.

Respecto al mercado chileno, Medina fue claro al decir que “es un súper mercado; los chilenos consumen muchísima fruta, el per cápita es 8.2 a 8.3 kilos y nosotros estamos más o menos alrededor de los 5 kilos”.

A su juicio, este año ha sido un buen año para la palta peruana en Chile, ya que "hemos tenido 2 a 3 semanas en las cuales le hemos enviado hasta 150 contenedores en una sola semana. Es nuestro vecino, hay que saber cuidarlo, hay que saber enviar buena fruta, porque Chile sabe comer y consumir muy buena fruta”.

En el caso de otros países de la región, agregó que Argentina es un buen mercado para calibres pequeños.

Continuando el análisis, Medina señaló que Perú puede exportar a 69 países en el mundo. “Nos falta ingresar a Australia, Nueva Zelanda, Taiwán, Vietnam y México, por lo que esperemos poder ingresar a algunos mercados este año que viene”.

En esa línea, explicó que es necesario que la industria tome en cuenta los días que demora en llegar la fruta a cada uno de estos destinos. "Hay países importantes donde todos queremos llegar como India y nos demoramos actualmente 60 días, por lo que tenemos que preocuparnos de llegar bien con nuestra fruta”.