Presidente de Asoguanábana de Ecuador: "Casi la mitad de la industria está al borde de la quiebra"
“En este momento todo el sistema productivo de Ecuador, tanto la industria de proceso y la producción de campo, estamos al borde de la banca rota, incluida la guanábana ecuatoriana”. Esas fueron las palabras textuales del presidente de Asoguanábana de Ecuador, Daniel Ortega a Portalfruticola.com.
Los comentarios generan una gran incertidumbre e inquietud, por lo cual Ortega explicó que actualmente Ecuador enfrenta una grave situación debido a los apagones, los que provocan que no tengan luz para la producción. “Casi la mitad de la industria está al borde de la quiebra, esa es la situación real en términos productivos”.
Fue enfático al decir que “nunca nos ha gustado victimizarnos, pero lastimosamente es la vulnerabilidad que nos da el cambio climático, ya que la agricultura es un sector vulnerable, porque llueve mucho o llueve poco. En este caso no llueve, entonces no tenemos ni siquiera agua para regar y en base a ello no tenemos la energía para el riego”.
Explicó que, de manera lamentable, todas las cosechas se han visto afectadas, no solo la guanábana, sino más bien es una situación que se ha dado tanto al nivel de la costa y de la Sierra, que requieren agua para la producción.
“Todos los productos se han visto afectados, tanto los de agroexportación como los productos de consumo interno. No estamos todavía en una situación de seguridad alimentaria”, dijo.
El presidente de Asoguanábana, señaló que en base a información otorgada por la Cámara de la Producción Nacional se han perdido casi 5.000 millones de dólares desde que comenzó la sequía desde finales de septiembre hasta la fecha.
El líder de la asociación ejemplificó que, en el terremoto del 2016, las pérdidas se totalizaron en 3.000 millones de dólares, que es el 3% del PIB.
“Cuando hablamos de 5.000 millones, nos referíamos al 5% del PIB; son cifras muy sólidas que indican que los pocos productores que sobrevivan y después puedan acceder a los mercados, será bastante complicado para ellos”.
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Debido a la crisis hídrica y energética que afecta al país, explica que las cosechas han caído, los volúmenes han sido limitados, la disponibilidad de materia prima cae y en esas condiciones también el procesador industrial sufre mayores costos. “Entonces nosotros al que le vendíamos la fruta o la pulpa para terminar de procesarla y exportarla tiene un costo adicional, que es el costo de la energía”.
Detalló que la industria sabe que no van a tener utilidades, “ya que las utilidades las has utilizado para comprar generadores y diesel, para ponerlos a trabajar”.
Una opción ha sido la utilización de los generadores, pero de carácter temporal, ya que “no es para trabajar 8 a 14 horas al día como lo han venido haciendo; los generadores se dañan después de 2 a 3 semanas y hay que volver a comprar otro, entonces la probabilidad de que parte de la industria no sobreviva es muy alta”.
Son palabras crudas, pero que representan una lamentable realidad en la producción ecuatoriana.
Guanábana
La guanábana es un árbol, si bien la producción va a disminuir, esta va a continuar su siclo productivo, por más que no tenga riego.
Detalló que siempre que hay falta de riego, no afecta la calidad de la fruta, lo que sí se afecta es el volumen de cosecha, porque la guanábana es una fruta que tiene más del 80% de agua.
“Entonces en una cosecha con fruta más pequeña y con mayor cantidad de concentración de grados brix. Es una fruta que se puede aprovechar a nivel de industria, ya que no se daña la calidad interna, ni externa, ni estética”, explicó.
Pese a que la fruta como tal no se ve afectada en calidad, Ortega dijo que “se reduce el volumen total de cosecha a conseguir, que es con el cual nosotros generamos renta y podemos pagar los trabajadores. Eso hace que la poca fruta disponible, se siga pagando a precios muy bajos”.
Pese a que la situación es compleja, el ejecutivo profundizó diciendo que la solución tecnológica sería poder acceder al agua por medio de la energía solar u otras, pero eso lleva a un cuello de botella, que es el acceso al financiamiento.
“Acceder ahora a un préstamo en el país es impensable; las tasas de interés son muy altas y el sistema bancario al percibir los riesgos del sector agrícola nos hace aún menos elegible a la colocación, y el gobierno no ha destinado un paquete de inversión que nos permita salir adelante”, dijo.
Agregó que a los productores han enfrentado un alza en los gastos cercanos a un 30 a un 60%.
Acciones
Consultado sobre las acciones que están realizando para poder revertir de alguna manera la crisis que afecta al sector, indicó que se mantienen en coordinación con la Asociación Nacional de Fabricantes de Alimentos y bebidas, junto a otras gremiales.
“En este momento todo el sistema productivo de Ecuador, tanto la industria de proceso y producción de campo, estamos al borde de la banca rota. Si la situación se mantiene de aquí a diciembre, los que van a poder sobrevivir son aquellos que tenían altísimas reservas de recursos para solventar la situación o han podido transitar a generaciones de energías renovables en el corto plazo”.
Explicó que esta situación va a poner al pequeño productor en una gran vulnerabilidad. “Hay que ponerse en los zapatos de tener 8 a 14 horas sin luz, entonces nosotros hemos tenido a veces que levantar al personal en la madrugada, que es cuando hay flujo de corriente y prender el sistema de riego”, comentó.
A juicio de Ortega, dicha situación “es una tormenta perfecta, porque el país nunca se recuperó del Covid 19, ya que nunca regresó el acceso a financiamiento, ni a la productividad”.
Recomendación
Los plazos son acotados, por lo que el presidente de la asociación fue claro al decir que “la única recomendación realmente concreta que tenemos de aquí a un mes, es que el gobierno tiene que introducir un paquete importante de financiamiento subvencionado el sector agrícola productivo”.
Agregó que el gobierno lo puede hacer, porque han recibido líneas de financiamiento, y “se entiende que la están usando para solventar la necesidad del acceso a la energía, pero de nada va a servir tener energía, si ya no tiene un sector productivo”.
Aprovechó la instancia para enviar un mensaje a las autoridades de Estados Unidos, “para poder acelerar sus procesos que permitan el acceso al mercado. No puede ser que un proceso dure más de cuatro años, para el ingreso a un mercado de una fruta, es un sin sentido”.
El segundo mensaje fue para las autoridades gubernamentales de su país, de “introducir un paquete de incentivos fiscales suficiente, que sea subvencionado, pero de que al menos tengan un servicio de exportación activo. El gobierno está debilitando a las oficinas comerciales, no ha pagado los sueldos, ni siquiera los alquileres de las oficinas. Por lo que pedimos que cumpla con su función de brindar la asistencia para facilitar el acceso a los mercados”.
El tercer mensaje fue para los productores, a "trabajar de manera conjunta con el aparataje industrial y lograr precios que permitan al menos garantizar las exportaciones que el sector industrial necesita y que al productor le permita acceder a los recursos que necesita de liquidez para salir de la crisis”.
Estados Unidos
Profundizando sobre el retraso de la apertura del mercado de Estados Unidos, dijo que “ni siquiera dan luces concretas de cuándo van a aperturar el mercado. No tengo razones por el retaso”.
“Quiero pensar que el gobierno ha hecho su parte en el seguimiento, pero si Estados Unidos no responde y, ahora con el cambio de autoridad (llegada de Trump), la verdad es que no tengo esperanzas de que eso se pueda lograr”.
Con un poco de optimismo, Ortega señaló que “si logramos un mejor acceso a los mercados, como el de Estados Unidos por ejemplo y el gobierno entrega acceso al financiamiento, podemos transformar la crisis en una oportunidad”.
Finalizó diciendo que esta crisis energética no va a ser aislada, “ya es el segundo año que estamos en este ciclo; el año pasado fue menos corto, pero se espera que el próximo año y a futuro esto se acreciente”.