En sólo siete años, las exportaciones del sector silvoagropecuario chileno podrían duplicarse, pasando desde US$ 11 mil millones a US$ 20 mil millones, de conjugarse una mayor certeza jurídica acerca del aprovechamiento de las aguas para riego y un tipo de cambio más estable, según estimó ayer el presidente de la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA),  Luis Mayol...

El dirigente del agro formuló esta auspiciosa proyección en el marco de un seminario con empresarios del sector,  ocasión en la que explicó que, para poder impulsar este desarrollo, el desafió pasa por quintuplicar la superficie regada actualmente que actualmente supera el millón de hectáreas.

“Si pudiéramos aprovechar tan sólo el 50% de las aguas que se pierden en el mar entre Atacama y la Araucanía, podríamos elevar la superficie a 5,5 millones de hectáreas, lo cual sería un impacto económico tremendo para este actividad”,  afirmó.

Agregó que, para alcanzar ello, “necesitamos de una mayor certeza jurídica, ya que se requiere inversiones de mediano y largo plazo y los productores las hacen cuando tienen seguridad de la tierra y del uso del agua”.

Además, explicó que la mayor disponibilidad de agua pasa también por algunos trámites administrativos, “como que la Dirección General de Aguas (DGA) necesita más personal,  ya que tiene mucho trabajo acumulado para ir regularizando la situación”. También dijo que    se necesitan estudios sobre disponibilidades de las aguas en cada cuenca,  pues,  aparentemente, “se han otorgado más derechos de los que se puedan extraer, y que haya una disposición de ver la forma de implementar y financiar obras de riego para aprovechar las aguas que se pierden”.

Mayol afirmó además que el desarrollo de este potencial elevaría la productividad del suelo agrícola, permitiendo impulsar las inversiones y dinamizar los envíos silvoagropecuarios que se acercan a los US$ 11 mil millones,  dejando a Chile en el sitial 23, entre los países exportadores de alimentos.

“Si las exportaciones del sector volvieran a crecer en torno a 10%, llegaríamos a duplicarlas en 7 años,  logrando superar los US$ 20 mil millones el año 2016”, enfatizó.

Para cumplir esta meta, apuntó, además, a que “es un requisito esencial contar con un tipo de cambio competitivo”.

Fuente: Diario Financiero

25.junio.2010 - Portal Frutícola