La propia empresa solicitó el procedimiento, cuyo síndico a cargo es Patricio Jamarne.

Pasivos por cerca de $24.000 millones, es decir, unos US$50 millones, son los que alcanzó la tradicional empresaexportadora Aconcagua Limitada (Aconex), de propiedad de la familia Barros. Es así como el 17º Juzgado Civil de Santiago decretó ayer la quiebra, solicitada por la propia compañía, en las que diferencias familiares marcaron el desplome.

La sociedad estaba encabezada por el presidente y fundador de la exportadora, Fernando Barros y su hijo Alejandro, que ocupaba el cargo de gerente general. Ellos mismos son los principales acreedores: el primero por la suma de $4.700 millones, seguido por BancoEstado ($3.400 millones) y Agrícola Campusano –controlada por Alejandro Barros– por $1.700 millones.

De acuerdo a fuentes cercanas al proceso, las diferencias al interior de la sociedad, entre presidente y gerente general, datan desde 2006, sin embargo, el 14 de enero pasado, Fernando Barros demandó a Aconex por el no pago de pagarés. Por esto, el 20° Juzgado Civil de Santiago ordenó el embargo las cuentas corrientes y otra serie de procedimientos que paralizaron las operaciones de la compañía.

El síndico de la quiebra sería Patricio Jamarne, sin embargo, versiones indican que aún no ha jurado ni aceptado el cargo.

La Empresa

Aconex es una de las exportadoras de fruta fresca más antiguas de Chile, con operaciones desde 1976. De acuerdo a informaciones de la propia empresa, en más de tres décadas incrementaron su volumen de cajas enviadas sobre los cinco millones, exportando uva de mesa, carozo, cítricos, cerezas, kiwi, caquis y manzanas a mercados internacionales.

Operaban en 38 países, siendo los principales destinos: Canadá, México, Estados Unidos, Irlanda, Inglaterra, España, Holanda, Italia Rusia, Hong Kong, Japón, Corea, Taiwán, China, Singapur y Malasia

Fuente: Estrategia