Las firmas negaron ser responsables por las condiciones infrahumanas en las que vivían los cosecheros del limón y dijeron que la provisión de vivienda digna no es obligatoria.

El conflicto por el caso de trabajo esclavo en una finca del Grupo Lucci en Tucumán va tomando fuerza. El presidente de la Asociación Tucumana del Citrus (ATC), Roberto Sánchez Loria,  negó que en la citricultura provincial haya casos de este tipo. En tanto, las firmas Citrusvil y Adecco negaron ser responsables por las condiciones infrahumanas a las que eran sometidos los cosecheros del limón y señalaron que no es obligación proveer de vivienda digna a un obrero.

"Para mí, esto es una sorpresa, sobre todo porque en el citrus es poco común que se levanten campamentos con trabajadores, porque en las quintas se cosecha el limón de un tirón y luego los obreros son trasladados a otra quinta. Hay mucha movilidad de personal en nuestra actividad", señaló Sánchez Loria a La Gaceta.

De esta manera, el titular de la ATC se refirió al caso de obreros oriundos de Santiago del Estero que eran sometidos a condiciones infrahumanas de trabajo, según detectaron la pasada semana la Secretaría de Trabajo de la Provincia y la Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores (UATRE).

Según la denuncia radicada en la Justicia Federal, la empresa contratista es Adecco Recursos Humanos Argentina SA y operaba en una finca ubicada en el kilómetro 14 de la ruta 304, en cercanías de la localidad de Boca del Tigre, departamento Burruyacu. El titular de UATRE, Jesús Pellasio, destacó que Adecco le brindaba el servicio de cosecha de limones a la empresa Citrusvil, del Grupo Lucci.

De acuerdo con el secretario de Trabajo, Roberto Jiménez, se descubrió que en una sola habitación vivían 54 personas, donde había algunas cuchetas y colchones en el suelo. Agregó que los cosecheros tampoco tenían mesas para comer, ni sillas para sentarse, y que había un solo baño para todos con duchas precarias y sin agua en el momento de la inspección, ni fría ni caliente.

El martes se llevó a cabo una audiencia entre las partes involucradas en la sede de la Secretaría de Trabajo de la Provincia. En la ocasión, el apoderado de Adecco, Agsutín Gollan, aseguró que esta firma “no incumplió, en ningún momento, la legislación laboral vigente” y rechazó la “injuria laboral” denunciada por los trabajadores y por UATRE, publica La Gaceta.

Dijo, además, que el contrato sigue vigente y a quienes deseen continuar con el vínculo laboral, Adecco les propuso "abonarles una gratificación voluntaria que compense las necesidades de alimentación y alojamiento" de los trabajadores. Por último, Gollan agregó: "la obligación de la provisión de una vivienda digna a los trabajadores no se encuentra contemplada como obligatoria a mi mandante (Adecco), ni en el convenio colectivo 271/96, ni en la Ley de Contrato de Trabajo".

Por su parte, el apoderado de Citrusvil, Federico Colombres, rechazó las imputaciones "por cuanto el predio relevado por la Secretaría, en el que se habrían detectado las irregularidades no pertenece a Citrusvil ni a ninguna de sus contratistas".

Fuente: Eldiario24.com