La intimación a productores por sus deudas en programas de agroquímicos y compras de maquinarías incorporó un nuevo elemento preocupante a la situación frutícola. Esta presión de cobro por parte de Río Negro Fiduciaria -que administra esos planes provinciales- irrumpió cuando las cámaras debaten cómo enfrentar la actual falta de rentabilidad frutícola.

Ayer se conoció del envío de intimaciones a productores deudores. El número de las mismas no fue posible confirmar, como tampoco "Río Negro" pudo hablar con el presidente de la Federación, Manual Mendoza, para precisar el alcance de esas acciones.

Por su parte, el ministro de la Producción, Juan Accatino, afirmó que ese proceso es habitual de parte de Río Negro Fiduciaria para defender los fondos públicos, pero dijo que "se evaluará cada caso en particular, como siempre se ha hecho". Resaltó que, en el PAR que financió la compra de tractores, el "cobro ronda el 98 por ciento" y que sólo a un productor incumplidor de Lamarque -por una "situación personal"- se le retiró esa maquinaria del PAR. Utilizó ese ejemplo para destacar que el Estado de Río Negro no persigue a los productores sino que "alienta la conducta de pago para mantener el financiamiento", que incluye aportes del Consejo Federal de Inversiones (CFI).

En esa línea, Accatino afirmó que el CFI autorizó otro aporte de cinco millones para continuar con el PAR para adquisición de tractores. Insistió con que la buena calificación de recupero de esos fondos fueron motivos para permitir este nuevo aporte. Aún así, el funcionario reconoce que ese período de intimación cae en un año malo para la fruticultura, por lo cual reivindicó que Río Negro seguirá con su "política de acompañamiento" y evaluará cada caso de los deudores intimados.

Según el informe 2010, Río Negro Fiduciario, a través de los fondos para la adquisición de agroinsumos y de maquinarias, otorgó 266 créditos: 185 para tractores y y 81 para pulverizadoras.

Este fondo para la renovación de maquinarias agrícolas fue creado en el 2005 para el "fortalecimiento productivo y del plan integral de lucha contra plagas". En el censo Agrícola CAR 2005, se detectó que el 70 por ciento de los tractores y el 50 por ciento de las pulverizadoras tenían una antigüedad superior a los 20 años.

Esa necesidad se combinó con un plan del CFI que estaba orientado a la compra de maquinaria agrícola, especialmente tractores y pulverizadoras. (AV)

Fuente: Rionegro.com.ar