Mundo: Marruecos logra 150 millones del Banco Mundial para crecer en cultivos citrícolas
Las ayudas para el plan marroquí se suman a los 135 millones de Bruselas del periodo 2011 - 2013
El Gobierno de Rabat sigue firme con su apuesta por implantar el Plan Marruecos Verde porque ayudas e inversiones extranjeras no parecen faltar. El proyecto con el que el Reino de Mohamed VI quiere cuadruplicar la producción del olivar y duplicar la de cítricos -con vistas a llegar a 3,19 millones de toneladas anuales a partir de 2020- mediante subvenciones e incentivos fiscales para esos cultivos acaba de lograr un préstamo del Banco Mundial de 150 millones de euros, según ha informado la agencia marroquí de noticias MAP. Esta línea de crédito se suma a la aprobada recientemente por el Ejecutivo de Bruselas al comprometer entre 2011 y 2013 hasta 135 millones de euros en ayudas para programas marroquíes de desarrollo rural y agrícola, según constata un informe de la oficina de la Unión Europea en Marruecos.
El ambicioso proyecto agrario de Marruecos se produce en plena negociación de la nueva Política Agraria Común (PAC) en Europa y poco tiempo después de que Bruselas selle un pacto comercial con el reino alauita que perjudica seriamente los intereses comerciales de los cítricos valencianos y otros cultivos como el tomate, pues reduce ampliamente aranceles y contingentes de las frutas y hortalizas de Marruecos para sus exportaciones a países del Viejo Continente.
También en el marco del Plan Marruecos Verde, según la agencia MAP, las autoridades de este país recibirán unos 2,9 millones de euros del Banco Mundial, que deben reforzar las capacidades de los agricultores para adaptarse a los efectos derivados del cambio climático. Esta concesión servirá "para modernizar la gestión del sector agrícola por medio de reformas institucionales y sectoriales, lo que permitirá reforzar la integración de los agricultores en el mercado interior y mejorar la economía de los pequeños agricultores, entre otras medidas".
El Plan Marruecos Verde impulsa en los últimos años las inversiones extranjeras en territorio marroquí y alienta la especulación en los mercados hortofrutícolas. Un fondo de inversión de Abu Dabi ha logrado una concesión de Marruecos para explotar 700.000 hectáreas de cultivo de regadío. En las últimas tres décadas Bruselas ha facilitado 835 millones a Marruecos en programas de desarrollo rural y agrícola.
Fuente: Levante-emv.com