Con aportes del gobierno nacional, el Gobierno de Entre Ríos destinará 12 millones de pesos a dos proyectos que tienen por objetivo apuntalar a la actividad citrícola en la provincia.

Seis millones de pesos se destinarán a la puesta en marcha de una planta industrial de jugos cítricos en la localidad de Villa Rosario, una iniciativa que beneficiará a 400 productores citrícolas de la zona.

En un comienzo se estima que la planta producirá ocho toneladas de jugo por hora y en el futuro se proyecta ampliar esa capacidad de producción a 12 toneladas.

Para ello, en agosto, se suscribió un fideicomiso para la administración de los fondos y se definió por concurso el nombre de la futura firma, que será Jugo de las Colonias de Federación, Entre Ríos Sociedad Anónima (Jucofer S.A.)

El terreno de ocho hectáreas donde se construirá la misma está ubicado en lo que será el área industrial de Villa del Rosario. Allí se culminó el cerco perimetral y el nivelado del terreno, se construyó una pared para el portón de acceso y se abrieron las calles linderas que además fueron enripiadas.

Los otros 6 millones de pesos se destinarán a la reconversión de las variedades frutales para pequeños productores de citrus.

El proyecto consiste en la implantación de nuevas variedades de especies cítricas, que permitan diversificar la producción, las épocas de comercialización y los mercados de destino, incrementar los ingresos del productor pequeño y mediano, haciendo énfasis en la mejora de la calidad de los frutos ofrecidos al mercado.

La provincia prevé atender alrededor de 1400 pequeños y medianos productores citrícolas de los departamentos Federación, Concordia, Federal y Colon, agrupados en las distintas asociaciones citrícolas de la región.

A pocos días de este anuncio, dos empresas citrícolas, Citrícola Chajarí y Nobel, anunciaron que dejaran de exportar y supendieron a parte de su plantel de trabajadores.

"Perdemos entre 2 y 3 dólares por cada caja de citrus que exportamos", puntualizó el propietario de Citrícola Chajarí, Hugo Tarditti, que suspendió 380 empleados.

Por su parte, la empresa Nobel suspendió a 80 de sus 270 empleados.
Los costos en la Argentina se incrementaron fuertemente mientras los precios internacionales se mantienen o caen, dicen en el sector. Así, una combinación de dólar estancado y una inflación que crece al 25 por ciento anual para el sector explicaría parte de la problemática citrícola.

A esto se suma una crisis europea que bajó el precio del citrus y las ventas.

Fuente: Puntobiz.com.ar