Chile: Vapores Navegaría en Aguas Tormentosas en Próximos Tres Años

Mercado y economia - F Noticias - F
Chile: Vapores Navegaría en Aguas Tormentosas en Próximos Tres Años

Si bien el ingreso de los Luksic a la propiedad de la compañía generó mayor confianza en el mercado, el difícil contexto global de la industria naviera pondrá a prueba su poder de gestión.   

Un complejo panorama es el que vive la industria naviera. Un alto valor del petróleo y bajos precios de los fletes hacen tambalear a la firmas del sector, entre ellas, la Compañía Sudamericana de Vapores (CSAV), la que sabe de crisis. Sin embargo, el ingreso de los Luksic a la propiedad –a través de un pacto controlador con el Grupo Claro– generó esperanzas en el mercado, aunque quedan dudas de cómo serán capaces de afrontar el escenario turbulento.

Un gigante difícil de estabilizar, incluso para los Luksic, pues sólo el crudo representa un tercio de sus  costos totales, mientras que las tarifas promedio de fletes en servicios de portacontenedores presentan una caída de 14% respecto del trimestre anterior, “el que a su vez ya mostraba un deterioro respecto del tercer trimestre de 2010”, detalla la propia compañía en su Fecu a marzo.

Y es que el “temporal” para la industria está lejos de amainar. “Para que el crecimiento de la demanda equipare la fiebre de aumento de la oferta previo a la crisis se van a necesitar varios años, recién a fines de 2013 o el 2014”, indica el experto en temas navieros y jefe de la unidad de Recursos Naturales e Infraestructura de Cepal, Ricardo Sánchez.
“Hay demasiados barcos navegando, fruto de una fiebre expansiva anterior a la crisis del 2009, pero también después de ella, cuando se creía superada, volviendo el optimismo demasiado rápido”, agrega.

VULNERABLE

Según la consultora francesa especializada en el negocio naviero, Alphaliner, a la fecha hay 5.968 barcos activos, de los cuales CSAV posee 134, sólo 10 de ellos propios correspondientes a sólo un 8,5% de la capacidad de trasporte medida en Teus, no alcanzando el estándar internacional de contar con un 50% de naves propias. Aún así, la chilena asoma como la octava empresa más importante del negocio en el mundo, con un 3,5% de participación, pero lejos del 15,5% y 12,8% de participación de las líderes APM-Maersk y MSC, respectivamente.

Esta alta dependencia a la flota arrendada hace más vulnerable a Vapores a los vaivenes del negocio, indica la clasificadora de riego Feller-Rate en su último informe de julio, y si bien señala que la mayor proporción de flota propia que, tras las nuevas adquisiciones contempladas en el programa de inversiones, superaría el 20% en términos de capacidad de carga, permitiría reducir la exposición al riesgo “esta proporción permanecerá aún por debajo del promedio de la industria, cercano al 50%”.

Y añade que los arriendos de naves suscritos por los armadores pueden variar desde tres meses y hasta cinco  años, con modalidades de tarifas mayoritariamente fijas. Al 31 de marzo de 2011, la compañía mantenía en régimen de arrendamiento operativo un total de 189 naves.

PROBLEMAS FINANCIEROS

Esta mayor vulnerabilidad ya ha afectado a Vapores anteriormente. Durante el 2009, por ejemplo, las ventas de la compañía cayeron en un 38%, mientras que la generación de Ebitda fue negativa en US$600 millones.

Pero para algunos el 2010 parecía auspicioso, con una recuperación tanto en los volúmenes trasportados como de los precios de flete, alcanzando a septiembre ventas consolidadas por US$4.092 millones y un Ebitda de US$276 millones. Sin embargo, a contar del último trimestre de ese año, los resultados fueron empeorando. Así, el primer trimestre de 2011, pese a que las ventas alcanzaron los US$1.523 millones –creciendo 36,9% respecto a igual período del año anterior– la generación de Ebitda fue negativa en US$179 millones.

En cuanto a la deuda, el informe de Feller-Rate indica que a marzo de 2011, el stock de deuda alcanzó a los $900.000 millones, registrando un aumento de 90,4% desde el cierre del ejercicio 2009, y agrega que “la compañía aún mantiene el desafío de cumplir con compromisos de pago por arriendos de naves que totalizaban los US$821 millones anuales, en un contexto de mantenerse la capacidad de generación de flujos fuertemente restringida”.

EL REARME DE LAS RUTAS

Ante esto, la opción que tomó Vapores fue reestructurar sus rutas, declarando la suspensión de operaciones en los servicios Nacsa, Asiam y MNS. Asimismo, ya firmó un acuerdo de cooperación con Mediterranean Shipping Company (MSC), la segunda empresa naviera más grande del mundo, para la operación conjunta de tráficos.

Fuentes del sector, indican que esta medida ayudará a disminuir los altos costos que mantenía la firma en un contexto altamente adverso. “Las alianzas operativas o comerciales nacen como una opción de racionalizar servicios,  justamente por el exceso de oferta”, agrega Ricardo Sánchez.

 Lo adverso del momento naviero volvió a influir es los resultados de CSAV mostrando, por ejemplo, un Ebitda negativo por US$179 millones al 31 de marzo del 2011.

 Fuente: Estrategia

Suscríbete a nuestro Newsletter