Durante el último tiempo, la fruticultura ha experimentado un importante incremento en la zona sur del Chile.

Un buen ejemplo de esto es la provincia Malleco, en la región de La Araucanía,  donde desde el año 2007 a la fecha se han instalado cuatro plantas exportadoras de fruta.

Según el jefe de la oficina SAG Angol, Christian Wolf, las inspecciones de frutas para exportación, aumentaron de  800 mil cajas el año 2007 a más de tres millones y medio esta temporada. Los destinos de la fruta inspeccionada en Malleco son  principalmente los mercados de EE.UU, Unión Europea, Asia y Sudamérica, llegando a más de 30 países en total.

Wolf detalló que durante el período de exportaciones 2010-2011 se inspeccionaron peras, cerezas, arándanos y manzanas, siendo esta ultima la fruta de mayor importancia con 2 millones 400 mil cajas, lo que representa un 70% de las inspecciones que realiza el SAG en esta provincia.

Este incremento obedece a diversos factores, siendo algunos de estos según las empresas exportadoras, las condiciones climáticas y la calidad de la tierra, ambos factores que en el caso de  las manzanas, les otorga mayor cobertura de color y firmeza, atributos muy apetecidos por los distintos mercados.

Al respecto, Francisco Amezaga, gerente de la planta San Clemente, ubicada en la Comuna de Renaico,  que se inauguró en marzo de este año y ya realiza envíos a Europa, EE.UU, Canadá y Asia, explicó que para los mercados el color  de la fruta tiene gran relevancia y en esta zona la temperatura  y las horas frio permiten sacar manzanas con un color más intenso. “Es la intensidad y el porcentaje de cubrimiento de color el que determina  la categoría de una manzana, a mejor categoría, mejor precio”, puntualizó.

Francisco Ramirez, encargado de exportaciones del SAG en Angol, coincide con  este punto, señalando que la diferencia de temperatura que hay entre el día y la noche  es muy amplia, condición que otorga a la manzana un color más fuerte  y propiedades organolépticas  que se expresan de mejor forma en la fruta de esta zona.

El profesional agregó que, además de los atributos que pueda entregar el clima de esta zona, los países de destino exigen a las plantas exportadoras un producto sano, libre de enfermedades y plagas cuarentenarias, y en ese sentido le corresponde al SAG certificar la calidad fitosanitaria de la fruta de exportación. “Con la inspección fitosanitaria garantizamos a los países de destino que  las plantas exportadoras cumplen con los requisitos fitosanitarios que ellos establecen”.

Respecto al panorama futuro, el jefe del SAG sector Angol, proyectó un aumento de un 22% de  cajas a inspeccionar para la próxima temporada que comienza en noviembre, en relación al período recién finalizado.

Por último, es importante señalar que tanto las inversiones realizadas  en Malleco  como el alentador panorama que se vislumbra en el rubro de la fruticultura, contribuyen a cumplir algunas de las metas del Plan Araucanía 7, tales como  incorporar 4 mil hectáreas a frutales; aumentar y/o mejorar el riego en 9 mil hectáreas y generar 409 nuevas empresas medianas y grandes.

Fuente: Fucoa