"Poniendo la huerta dejo de sembrar marihuana", expresó Herculano Lagarde, un campesino que manifestó su satisfacción por el programa de los huertos subtropicales que beneficiarán en lo futuro a los serranos.

"Es que así se abren oportunidades de trabajo en la Sierra", dijo el hombre, uno de los 75 campesinos que será beneficiado en el municipio con el programa de huertos implementado en la Sierra Tarahumara.

"En vez de que se vaya el agua para Sinaloa, aquí la retenemos", dijo el presidente seccional, agregando que a sequía de julio provocó graves conflictos en la comunidad, por lo que tuvo que intervenir la Policía Municipal, ya que la gente buscaba el agua a como diera lugar. Hubo manifestaciones de mujeres que se levantaban a las dos de la mañana, "y ya les habían ganado el agua", por ello, se autorizó la construcción de las represas que vinieron a solucionar el problema y calmar a la gente que nunca antes había sufrido por la falta de agua, acotó por su parte José Loreto Lagarde.

BALAZOS POR FALTA DE AGUA:

Ante la falta de agua, donde se llegó a tener "más lechuguilla que agua" y provocó conflictos internos "al extremo de agarrarse a balazos", se construyeron cincuenta represas para consumo humano y animales en esta sección municipal de dos mil habitantes, colindante con el municipio de Álamos, Sonora, manifestaron José Loreto Vega, presidente seccional, y Martín Solís Reyes, coordinador del programa de Fruticultura Subtropical en la Sierra Tarahumara de la Secretaría de Desarrollo Rural del Gobierno del Estado.

La sequía de julio pasado provocó graves conflictos en Milpillas, ya que este año fue uno de los más secos de los últimos 40 años. "Nunca se había visto a la gente peleándose por el agua, al grado de agarrarse a balazos", explicó José Loreto Vega Lagarde, durante la visita a una de las 50 represas construidas en esta población serrana.

La construcción de las represas se hizo a iniciativa de serranos que se interesaron en el programa de huertos frutícolas subtropicales para la plantación de árboles de aguacate y cítricos en el municipio de Chínipas, propuesto por la Secretaría de Desarrollo Rural del Gobierno del Estado.

"Estamos interesados en el programa frutícola pero no tenemos agua", dijeron los serranos, y en respuesta el Gobierno del Estado autorizó mil 450 horas para la construcción de represas y a la vez servirán para el cultivo de huertos frutícolas. En el municipio de Chínipas se autorizaron 60 hectáreas para la plantación de aguacate, distribuidas en las comunidades de Gorogachi (40 hectáreas); La Chinaca (10 Has.) y el resto en La Lobera y San Antonio Montenegro, indicó el coordinador del programa de Fruticultura Subtropical.

Fuente: Oem