Se trata de la empresa local Soluciones Aéreas que además brinda el secado de frutas y pulverización para frutos en cultivos de uva de mesa, arándanos y olivos

En esta época del año la brotación y floraciones de vides, frutales y olivos ya está en marcha y los peligros de las heladas tardías son importantes ya que provocan serios daños en la producción. Los productores recurren a distintos métodos para combatir heladas por enfriamiento del suelo, son las más frecuentes y menos difíciles de paliar que las advectivas.

En el campo se está usando la calefacción con tachos distribuidos en el terreno, los cuales emiten calor por la combustión de gas oil, fuel oil, etc. También la aplicación de riego por aspersión, que funciona emitiendo calor al medio cuando el agua asperjada se congela. Otro sistema usado es el de los caloventores que es una es una máquina, que envía chorros de aire caliente a lo largo del terreno al combinar un ventilador centrífugo con quemadores de gas propano. Debe circular a lo largo del terreno, para lo cual une al toma de fuerza del tractor. Esta ráfaga de viento alcanza hasta 130 metros de longitud y la temperatura que proporciona dura tan sólo 10-12 minutos por lo tanto el equipo debe volver al punto de inicio antes de transcurrido ese tiempo. Este equipo puede controlar una superficie de 10 hectáreas aproximadamente.

También se emplea el uso de molinos de viento que son torres con una hélice inclinada en un 6%, y se basa en la circulación forzada en sentido vertical del aire más frío cercano al suelo y de la menos fría presente a mayor altura. La altura de las torres no supera los 15 metros y la longitud de la hélice es de 5 a 6 metros. Funcionan en general con gas. Su principal desventaja es el alto costo de inversión que presenta.

En otros lugares del país y países desarrollados se utilizan helicópteros para mezclar los estratos de aire caliente más altos, aquellas que los molinos no alcanzan, con las más superficiales. Aunque su costo de operación es mayor que los otros métodos, es muy usado en lugares con disponibilidad de helicópteros y para cultivos muy precoces y con mucho riesgo de heladas. Todos los métodos descriptos menos el último son aplicados en la provincia. Ahora por iniciativa de la firma Soluciones Aéreas se ofrece a partir de esta temporada el servicio y además para el secado de frutas y pulverización para cultivos de uva de mesa, arándanos y olivos.

"Lo importante de la operación con helicópteros en el control de heladas es que vuela dentro de la capa de inversión térmica en los 4 a 8 metros sobre el terreno produciendo una circulación de aire que permite elevar la temperatura en las plantaciones sobre los niveles de congelación del fruto", explicó Antonio Sanchez, piloto de avión y responsable de Soluciones Aéreas.

Otro factor que ayuda la diferencia marcada entre una aeronave a turbina y otra con motor convencional es que por la tobera de escape del primero sale un gran volumen de aire caliente con temperaturas sobre los 250 grados centígrados.

El efecto creado por el rotor principal del helicóptero (flujo inducido) crea una aceleración de las partículas de aire produciendo fricción entre ellas, comprimiendo el aire produciendo un aumento de la temperatura y movilidad de la masa local del aire. En el 2009 hemos realizado un control de heladas con una aeronave Bell 206 JR 111 en la localidad de Huillapina, Catamarca para uva de mesa en 60 hectáreas logrando un 90% de eficiencia de operación.

El rendimiento es de entre 20 a 40 hectáreas de protección asumiendo que la nave debe pasar por el mismo punto cada 15 a 20 minutos. La altura de vuelo debe ser menor a 15 m, por lo cual se requiere adoptar medidas de seguridad extremas para el piloto y el personal de apoyo en tierra. Sanchez explicó finalmente que "el costo depende de varios factores pero puede oscilar entre $3.500 a $4.000 la hectárea".

Fuente: Diario de Cuyo