El exceso de humedad afectó la calidad de la naranja y mandarina, así como la apertura de vías. Por ese motivo la producción post-invierno se está perdiendo en los campos.

Así lo expresó Walter Gómez, agricultor que la mayor parte de su vida se ha dedicado a sembrar frutas y luego, ante el pedido de su clientela, se vio motivado a comprar a sus vecinos y adentrarse en la comercialización al por mayor. La mandarina que llega a las bodegas del comerciante en el sitio El Guineo en otros tiempos se ha vendido a Colombia y Venezuela, pero ahora la producción es mínima, aunque envió muestras del producto para vender.

El ciento de mandarina se cotiza en 5 dólares y la naranja a 4 dólares, y ante la escasez se prevé que su valor no baje en lo absoluto.

reacción. “El invierno casi nos ha liquidado. Hasta hace 15 días estuvo lloviendo fuerte. En la montaña no se lograron abrir las vías”, expresó Gómez.

Lo dicho por el agricultor lo corroboró el alcalde Jaminton Intriago. Aseguró que varias veces las vías rurales han sido intervenidas, pero las lluvias nuevamente las destrozaron. “Ahora los resultados están a la vista con la situación que viven los campesinos”, dijo el alcalde de Flavio.

La cosecha de los cítricos por lo general era en mayo, y la otra en agosto. Sin embargo más del 80 por ciento se la da ya por pérdida, se informó.

Fuente: El Diario