Además de las heladas y del granizo que habían afectado la producción tiempo atrás, ahora fue el viento el que causó la pérdida del 50% de la cosecha de ciruelas y duraznos.

Los fuertes vientos que vienen azotando a esta zona desde hace varios días, causaron importantes daños en la producción de ciruelas y duraznos que están justo en plena cosecha. También afectaron la pera que viene madurando a buen ritmo y que comenzará a cosecharse a mediados de enero.

El viento sumó otro flagelo para la localidad, que ya había sufrido las consecuencias del granizo y de las heladas tardías.

El nuevo fenómeno climático que azota a toda esta comarca desde hace un par de semanas originó la caída de un 50 por ciento de los frutos de carozo.

Una recorrida de "Río Negro" por distintas chacras de Río Colorado, permitió advertir la desazón de los productores al ver "regado" todo el suelo por las frutas que cuidaron todo el año.

"El clima se ensañó con el chacarero de Río Colorado, parece que además de los problemas que ya tenemos con los costos y los valores, ahora tenemos que pelear contra el clima. Esto nos empuja más al abismo para desaparecer", manifestó el productor Ariel.

Este nuevo panorama ciertamente genera dificultades y pérdidas para las economías en las chacras, afectando directamente a toda la comunidad.

Hasta la jornada de ayer no pudieron brindar mayores precisiones ni cuantificaciones sobre los daños, en forma oficial. "Estamos constantemente en contacto con los productores y todos sufrieron pérdidas, mas el agregado que los vientos impidieron las correctas fumigaciones, que se necesitan para curar en esta época", dijo Víctor Pardo, presidente de la Cámara de Productores.

Las estimaciones preliminares planteaban que los daños por frutas caídas al suelo llegarán al 50 % para las ciruelas, cerca del mismo porcentaje para el durazno, mientras que para la pera rondará el 30 %.

"Esto que ves tirado en el suelo, sólo sirve para los chanchos, pero no tenemos dinero para poner personal que las junte", remarcó otro de los productores afectados.

Las ráfagas de viento de los días pasados llegaron a los 100 kilómetros por hora, provocaron caídas de varios álamos y árboles de grandes dimensiones en diferentes sectores que llegaron a causar inconvenientes en el tendido eléctrico y de telefonía, donde por momentos pareció que arrasaba con todo lo que tenía en su camino.

Fuente: Rionegro.com.ar