Tras un crecimiento inicial, las ventas de alimentos y bebidas en los supermercados muestran ahora una llamativa caída

El congelamiento de precios, que está a punto de cumplir dos meses , no consigue reactivar el consumo. Según un relevamiento privado, las ventas de alimentos y bebidas en los supermercados en las primeras cinco semanas de aplicación de los precios congelados muestran vaivenes muy marcados, con subas interanuales pronunciadas en las primeras semanas del mes que, una vez pasado el efecto de cobro del sueldo, se desaceleran. Y la señal más preocupante es que entre el 4 y el 10 de este mes -última semana relevada- las ventas tuvieron una llamativa caída frente al mismo período del año anterior.

En todos los casos, los datos se desprenden de la medición que hace la consultora CCR tomando en cuenta las ventas en unidades (es decir, sin el impacto de la inflación ) de 124 categorías de productos de primera necesidad, desde alimentos envasados, bebidas con y sin alcohol, lácteos, congelados y golosinas hasta artículos de limpieza y tocador.

Según el trabajo, a partir del congelamiento la demanda tuvo su pico en la cuarta semana -del 25 de febrero al 3 de marzo-, cuando las ventas tuvieron una suba interanual de 3,8%, aunque siete días después se produjo una baja de 0,3%.

"Seguramente vamos a tener un mes complejo, ya que normalmente las semanas que le siguen a la primera del mes tienden a tener un comportamiento dispar. En ese sentido, hay que ver lo que pasó en febrero, que terminó con una fuerte caída", explicó José Ignacio Amodei, director de CCR.

De hecho, en febrero las ventas tuvieron un desempeño muy errático. El mes se inició con una suba interanual del 3,2% en la primera semana, aunque en la segunda el incremento se desaceleró al 1% y en la tercera el alza fue de sólo 0,1 por ciento.

En CCR además precisan que la medición en los supermercados se realiza sobre una base de cantidad de locales que registró un leve incremento en el último año, por el moderado ritmo de aperturas que impulsaron las grandes cadenas, lo que en los hechos puede implicar una desaceleración en la venta en unidades por boca.

A la hora de explicar la baja en las ventas de marzo, en CCR ensayan diferentes teorías. "Hay varios factores que pueden explicar esta situación: desde un poder adquisitivo disminuido hasta el efecto de inicio de las clases, con todo lo que implica en gasto para las familias. Además, tampoco se pueden descartar otros factores como la idea de que si los precios están congelados no hay razones para anticipar las compras, pasando por la tensión entre fabricantes y las cadenas que impacte en el abastecimiento o la disminución de la capacidad de atracción de los supermercados como consecuencia de la falta de tentación de los consumidores por la no publicación de ofertas", explicó Amodei.

SIN PRECISIONES

Cuando se consulta a las propias cadenas de supermercados y empresas de consumo masivo acerca de la evolución de sus ventas en las últimas semanas, la mayoría se muestra muy cauta. "Febrero fue un mes raro para hacer evaluaciones porque hubo muchos feriados y gente que se fue a la costa atlántica", explicaron en una cadena líder.

Una de las pocas voces públicas sobre el tema fue la de los autoservicios chinos. "El año comenzó un poco flojo, con las ventas muy quedadas en enero y febrero, pero a partir de marzo se nota un repunte. Creo que lo peor ya pasó", se mostró esperanzada Yolanda Durán, presidenta de Cedeapsa, cámara que reúne a los autoservicios orientales.

LO QUE VIENE

Más allá de la evaluación de los resultados que se haga, el congelamiento de precios ya tiene fecha de vencimiento. En las últimas reuniones de "la escuelita" -los encuentros semanales que realiza Moreno con toda la cadena industrial y comercial, incluidos los supermercados-, el secretario de Comercio Interior ya anunció que a partir de mayo empezarán a aplicarse subas en forma gradual, de acuerdo con los pedidos que fundamente cada empresa.

Para autorizar o no los aumentos, los proveedores deberán presentar ante los funcionarios de Comercio Interior una estructura detallada de sus costos y, en el caso de obtener el visto bueno de Moreno, podrán avanzar con incrementos escalonados de acuerdo con el tipo de producto y con la marca, que en promedio rondarán el 6 por ciento.

En forma paralela al congelamiento de precios, el otro tema bajo la lupa de los supermercados es el avance del proyecto que impulsa el mismo Moreno para lanzar una tarjeta de compras exclusiva. Este proyecto, sin embargo, está ligado a la suerte que tenga la negociación que mantiene el Gobierno con los bancos para rebajar la comisión que les cobran a los comercios minoristas. En la actualidad, esta comisión se ubica en el 3%, y la idea oficial es que baje al 1%. Por este tema se espera para las próximas horas un encuentro entre Moreno y los bancos.

Fuente: La Nacion