“Aplicaciones de cobre son vitales para prevenir la infección con PSA en kiwi”
En charla de Arysta LifeScience para su producto Nordox® 75WG, especialista neozelandés Iain Latter destaca:
“Aplicaciones de cobre son vitales para prevenir la infección con PSA en kiwi”
Arysta LifeScience sostuvo una serie de reuniones técnicas con agricultores para conversar sobre las aplicaciones de productos cúpricos, aprovechando la visita de tres expertos internacionales: Iain Latter, Asbjorn Stromberg y George McHardy.
En el marco de esas actividades, despertó especial atención de los productores de kiwi la información que entregó el ingeniero agrónomo neozelandés Iain Latter, quien dio cuenta de una serie de investigaciones sobre aplicación de productos para el control de Pseudomonas syringae pv. actinidiae (PSA), tanto en su país como en otros donde ha atacado esta bacteria, con efectos devastadores.
De acuerdo a lo señalado por Latter, en Nueva Zelanda actualmente están utilizando un programa basado en cobre que empieza en la postcosecha. En otoño emplean productos para concentrar el proceso de caída de hojas. Hacen una aplicación cuando la desfoliación ha alcanzado el 50% y una adicional cuando se llega al 100%. Otra etapa clave corresponde a la poda, donde pintan inmediatamente todos los cortes y al día siguiente se aplica cobre.
Después se mantienen aplicaciones preventivas de cobre cada 30 días a no ser de que el pronóstico meteorológico indique riesgo de lluvia o eventos asociados a una alta humedad relativa. Cuando una lluvia supera los 50 mm repiten la práctica.
El uso de cobre se suspende durante la floración y también una semana antes de la cosecha.
Cómo manejar aplicaciones sucesivas de cobre
Los antecedentes de los ensayos de aplicaciones sucesivas de cobre entregados por Iain Latter resultaron una novedad para los asistentes.
En evaluaciones realizadas en kiwi, luego de 7 aplicaciones de cobre en un sector de plantas jóvenes a las cuales se les había dejado un exceso de carga, se observó algún grado de fitotoxicidad en hojas, aunque no en frutas. Sin embargo, kiwis de la misma edad a las cuales se les había retirado la carga, eran capaces de soportar esa dosis sin ningún problema. En huertos maduros, no se encontró fitotoxicidad con tratamientos similares. Aun en el caso donde se determinó algún grado de fitotoxicidad, explicó Latter, “el productor no está preocupado, porque no tiene PSA”.
Otro aspecto relevante es el posible efecto acumulativo del producto, por lo cual se están probando concentraciones menores a las comúnmente usadas, para determinar la dosis mínima efectiva. Hasta ahora los kiwis provenientes de Nueva Zelanda que han tenido este tratamiento cúprico, no han sobrepasado los límites máximos de residuos permitidos en los distintos mercados de destino. El especialista manifestó: “los monitoreos efectuados por Zespri no han superado el 10% del límite máximo permitido para cobre en kiwi”.
En casi todos los frutales, indicó Latter, los neozenlandeses siguen las indicaciones de la Comunidad Económica Europea, que pone un límite de 3 kg de cobre metálico/ha/año. Sin embargo en el caso del kiwi, dado el impacto de la PSA, los agricultores solamente se autolimitan para cumplir los estándares exigidos por supermercados y consumidores.
PSA: “Cuando te das cuenta que la tienes ya no te la sacas de encima”
Aunque Iain Latter hizo notar la gran diferencia entre las condiciones ambientales de Chile y Nueva Zelanda, accedió a dar algunas ideas a los productores nacionales. La principal, no subestimar la PSA:
–Es una enfermedad insidiosa. No sé cómo se comporta aquí, pero en todos los demás países del mundo donde ha aparecido, se dispersa muy rápidamente y destruye muchos huertos. Por ejemplo, en Italia, donde incluso no tienen el clima húmedo de Nueva Zelanda. Hay que ser cuidadosos y pensar que se trata de una grave amenaza, porque lo es. A diferencia de Pseudomonas en otros cultivos, en kiwi la PSA no se puede controlar. Cuando te das cuenta de que la tienes, ya no te la sacas de encima.
–¿Estima que los productores chilenos debieran hacer un programa de aplicaciones de cobre?
–Creo que debieran hacer ciertas mínimas aplicaciones de cobre para prevenir la infección de los huertos. El cobre es barato y tiene además beneficios para otras enfermedades del kiwi; por ejemplo, para el cáncer bacterial causado por otra Pseudomonas [P. syringae pv. syringae]. Pero sobre todo ayudará a disminuir el riesgo de contagio de PSA en sus huertos.
El cobre protege de la infección pero no la sana una vez producida
–¿A su juicio, cuáles son los períodos donde se requiere poner más atención?
–El tratamiento de invierno es muy importante, igual a lo que harías para cáncer bacterial. El siguiente en importancia corresponde a los nuevos brotes de primavera, dada su susceptibilidad y en especial cuando sufren daño por viento, granizo o heladas. En condiciones de frío con humedad, PSA es muy infecciosa. Ante un pronóstico de lluvias o condiciones de alta humedad en el período de primavera, con temperaturas entre 10 y 20ºC, todavía frías, debes preocuparte de que no se produzcan infecciones. El cobre protege de la infección, pero no la sana una vez producida. No hay un tratamiento químico curativo para PSA.
Según el experto, en Nueva Zelanda el mayor error de los agricultores ha sido no aplicar cobre ante la ausencia de sintomatología. Una vez que el síntoma aparece, ya es demasiado tarde.
–¿O sea que una vez que tienes PSA…?
–Eso sería todo.
–¿Significa que las aplicaciones dejan de ser útiles?
–No. Debes impedir que se expanda al resto de las plantas dentro del huerto. Una o dos plantas no son el fin del mundo, pero cuando alcanza al resto del huerto, tienes un gran problema.
Hemos trabajado en lograr bajas dosis de cobre
–Un aspecto subrayado por usted es el tema de las dosis de cobre.
–Hemos trabajado en lograr bajas dosis de cobre para uso en las etapas fenológicas posteriores a la dormancia. La dosis que usamos, de 37,5 gramos de Nordox® 75 WG por cien litros de agua (en verano) es muy efectiva para controlar PSA, pero debe aplicarse el 100% de lo recomendado; 80% no es suficiente. Es lo bastante baja como para no causar fitotoxicidad a las hojas por la acumulación a lo largo de la temporada. Si usas demasiado cobre, puedes acabar con algún daño a las hojas. No se trata de un desastre, pero tampoco es lo deseable. Si se usan dosis muy altas se dará ese resultado rápidamente.
–¿Qué pasa en el caso de la variedad Hayward?
–El segundo gran error en Nueva Zelanda, por parte de los productores de la variedad verde Hayward, ha sido confundir la “tolerancia” a PSA con “resistencia”. Aprendieron que tolerante es muy distinto a resistente. Cuando PSA alcanza niveles elevados, Hayward también colapsa.
–¿Qué mensaje final le daría a los productores chilenos?
–Mientras más puedan estar sin PSA, mejor.
Ensayo de cobre en otros frutales
Latter se refirió además a los resultados de evaluaciones comparativas del producto Nordox®75 WG (óxido cuproso) en diferentes especies.
Carozos: Nordox® 75 WG solo requiere una dosis de 90 gramos por 100 litros de agua para el control de Xanthomonas y Pseudomonas, contra 500 g de oxicloruro de cobre/100 l, el producto más usado tradicionalmente en Nueva Zelanda. Con esas dosis el oxicloruro resulta más caro, razón que ha motivado su reemplazo creciente por Nordox® 75 WG. Este producto, además se caracteriza por su gran resistencia a las lluvias, superando tanto al oxicloruro de cobre como al hidróxido de cobre.
Palto: mediciones en hojas demostraron que aun con una acumulación de 100 mm de lluvia, la mitad de las partículas del producto se mantienen sobre la superficie foliar.
Manzano: en control de cancro europeo (Nectria galligena) se evaluó el lavado por lluvia de un fungicida del grupo Pftalimida, bastando solo 25 mm de lluvia para que se perdiera en un 100%. Otra investigación de tres años en Irlanda probó que solo una vez que se agregaron aplicaciones de cobre en otoño al programa de control deNectria, este resultó efectivo. En Francia se comparó Nordox® 75 WG con caldo bordelés (únicos registrados en ese país para Nectria) en distintas variedades, superando la efectividad del primero ampliamente a la del segundo.
Uva vinífera: en Chardonnay, Nordox® 75 WG mostró un impacto inesperado en el control de oídio, para el cual no es normalmente indicado. Tuvo también un efecto sobre el 90% en Botrytis, sin diferencias estadísticas con un programa de nueve aplicaciones de fungicidas, de alto costo. En el caso de pudrición ácida superó todos los tratamientos ensayados. Sin excepción, Nordox® 75 WG tuvo un mejor comportamiento que un fungicida basado en hidróxido de cobre con el cual se comparó.