Permite eliminar patógenos y microorganismos de la fruta

El tratamiento de hongos y bacterias en las manzanas es un negocio difícil y, a nivel de packaging, a menudo se aborda a través del uso de un baño con fungicidas y pesticidas, un proceso con el potencial para descartar la certificación orgánica o ciertos mercados por completo debido a la restricciones sobre algunos residuos.

A raíz de lo anterior, una empresa de Nueva Zelanda ha tratado de ofrecer un método alternativo que mantiene tanto la enfermedad y el uso de químicos al margen, puesto que la solución es la tecnología de ozono.

En un café de Santiago de Chile, el director de OA-Global, Brendon Spencer, explicó de la manera más sencilla a Portalfruticola.com cómo funciona la tecnología de ozono y cómo su aplicación podría presentar una serie de beneficios para la industria global de frutas.

"En un proceso natural, la luz del sol llega a dos átomos de oxígeno y los corta en átomos individuales, que luego se combinan con otro átomo de oxígeno para formar el ozono, la masa se convierte de nuevo en oxígeno, pero algunos ozonos permanecen”, dijo.

"Lo que hemos hecho es básicamente lo mismo, pero sin usar luz ultravioleta. ¿Por qué es esto genial para el tratamiento de la fruta y hortalizas? Cuando el ozono entra en contacto con un microorganismo, el átomo de oxígeno unido débilmente oxida la membrana celular, en última instancia, causando la rotura osmótica y la destrucción de las células, lo que significa simplemente que mata a las bacterias y hongos”, agregó.

"El enlace débil se divide, dejando al oxígeno como un subproducto, por lo tanto, sin dejar residuos. El secreto es cómo transportar el ozono y aplicarlo fácilmente, pero las unidades que hemos creado son bastante pequeñas, asequibles y fáciles de usar".

Spencer indicó que ensayos iniciales de la tecnología con la compañía neozelandesa Apollo Apples en Hastings tuvieron éxito, poniendo en funcionamiento la nueva unidad en un baño de manzanas y un sistema de pulverización.

"El ozono se aplica en la bandeja de agua usando el agua existente como vehículo para llevar las manzanas hasta la cinta transportadora mientras están siendo lavadas", dijo Spencer.

"Normalmente, los fungicidas y pesticidas se mezclan en el agua para matar bacterias y hongos, entre otras cosas, luego la fruta va hasta una cinta transportadora  a través de una serie de rodillos que giran las manzanas, y al final son lavadas en un aerosol”, comentó.

"Luego, esas manzanas se secan, se empaquetan y se ponen en un almacén fresco, donde también tenemos unidades que eliminan etileno y mantienen las bacterias y los hongos a niveles muy bajos", agregó.

Asimismo, Spencer dijo que en el proceso, el ozono se adhiere a cualquier patógeno o microorganismos en la manzana y los mata.

"Limpiamos las manzanas al final del sistema de rociado y tenemos cero bacterias y cero hongos en ellas", aseveró.

Spencer comentó que si se compara con los costos de utilizar fungicidas y pesticidas en los baños de empacadoras, el producto se paga solo en alrededor de un año, dependiendo del tamaño de la operación.

"OA-Global venderá una unidad completa que se puede conectar a cualquier sistema actual, por lo que no hay costo para el sistema existente además de la alteración de los acoplamientos para unir nuestro equipo a la misma. No estamos utilizando otra cosa que no sea el agua que ya está en el sistema”, indicó.

"No sólo Apollo continuará con él, sino que otras grandes empresas en Nueva Zelanda han declarado que quieren uno también".

La compañía también ha tenido su ojo en el mercado chileno durante los últimos dos años, período que culminó recientemente con el desplazamiento de Spencer a la capital (Santiago). Él aún no habla mucho español, por lo que pide a los posibles socios comerciales chilenos que por favor sean pacientes con su acento neozelandés.

"Nos hemos reunido con algunos productores de fruta en Chile con una serie de productos que están a punto de completar sus estudios en Nueva Zelanda. El primer producto es el baño de manzanas", dijo.

"Somos serios al respecto y creemos que va a ayudar a la industria frutícola chilena, así que es por eso que estamos aquí. El hecho de haberme mudado aquí muestra que estamos muy comprometidos con este mercado”, aseveró.

"Entiendo que cuando llegas a un país nuevo tienes que probar la tecnología, y en realidad no importa lo que ha pasado en su país de origen. Tienes que probarlo aquí y hacer que la gente se sienta cómoda con los productos y cómoda conmigo. OA-Global está deseando trabajar con la industria local de frutas", agregó.

Finalmente, Spencer comentó que OA-Global estaría abierta a los ensayos de la tecnología en otras regiones el cultivo de manzanas de todo el mundo.

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