Miembros de diversas oficinas del Congreso de EE.UU. se reunieron esta semana para escuchar el progreso de la industria orgánica por encontrar maneras eficaces y seguras para luchar contra el greening o Huanglongbing (HLB), una de las enfermedades más serias que afecta a los cítricos a nivel mundial. 

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En la cita, The Organic Center (TOC) -una organización sin fines de lucro de EE.UU.- dijo que las preocupaciones van en aumento ante la intensa pulverización de productos químicos para combatirla.

La directora de ciencia del TOC, Dr. Jessica Shade, señaló a los legisladores que ellos podrían ayudar en la campaña para encontrar formas seguras para combatir la enfermedad al permitirle a sus electores saber cómo involucrarse.

"El greening no es sólo un problema orgánico, y esta investigación no es sólo para los productores orgánicos", dijo Shade.

"Esta enfermedad está amenazando a los productores de cítricos, tanto orgánicos como convencionales, pero muchos de los métodos no orgánicos que se utilizan para luchar contra ella están demostrando ser no sólo inadecuados, sino que plantean  riesgos peligrosos para el medio ambiente y la salud humana”, declaró.

"Las soluciones que encontramos para productos orgánicos pueden ser utilizadas por todos", aseveró.

TOC ha puesto en marcha un amplio estudio de varios años para encontrar métodos para prevenir y tratar la enfermedad, los que cumplen con los estrictos estándares del Programa Nacional Orgánico del Departamento de Agricultura de EE.UU. (USDA).

También se ha asociado con miembros de la industria, académicos y otras organizaciones no lucrativas en sus esfuerzos, y patrocina una campaña de medios de comunicación social -#SaveOrganicCitrus- junto con una unidad de crowdfunding para recaudar más fondos para la investigación.

De acuerdo al TOC, uno de los insecticidas más peligrosos que se utiliza mucho en la industria de los cítricos convencionales para el control de HLB es una clase de pesticidas conocida como neonicotinoides, cuyo uso está prohibido en las fincas orgánicas.

El uso de los neonicotinoides también se ha asociado a la muerte de las abejas y se ha descubierto que su uso en cítricos tiene efectos perjudiciales sobre las poblaciones de polinizadores.

"Los consumidores aman los cítricos. Ellos están consumiendo más y más cítricos orgánicos, y valoran el hecho de que están comiendo fruta que no ha sido rociada con productos químicos peligrosos", dijo Shade.

"Queríamos asegurarnos que los miembros del Congreso y su personal estuvieran actualizados, porque necesitan saber cómo están siendo afectados sus electores, y lo que pueden hacer para animar a soluciones efectivas”, comentó.

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