Muestreo ratificó ausencia de dos plagas exóticas de las abejas en Argentina
Una investigación realizada entre octubre de 2013 y marzo de 2014 por el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) de Argentina, ratificó la ausencia de plagas exóticas de las abejas, causadas por Aethina tumida y Tropilaelaps spp.
De acuerdo a información entregada por el Senasa, el estudio se llevó a cabo mediante la inspección de más de 300 apiarios y 5 mil colmenas distribuidas en todo el país, ratificando el estatus sanitario de Argentina como un país libre de dichas plagas.
Lo anterior, pese a que en reiteradas ocasiones se comunicó la sospecha de la presencia de Aethina tumida, no obstante, gracias al actuar del Senasa, se pudo descartar la presencia de dicho coleóptero mediante investigaciones de laboratorio y clasificación taxonómica de los ejemplares recolectados.
Cabe señalar que la ausencia de estas plagas se extiende al resto de Sudamérica, región que, con el objetivo de mantenerse protegida, estableció a nivel del Mercosur una serie de requisitos de importación de abejas reinas que exigen –a los países proveedores- la ausencia de los parásitos causales.
El Senasa destaca que en 2004 se realizó un estudio epidemiológico en la provincia de Buenos Aires con la finalidad de confirmar la ausencia de estas peligrosas plagas en las colmenas de la región, determinándose la “inexistencia de signos e individuos compatibles”.
De esta forma, y durante los años siguientes, se realizaron estudios similares en todo el territorio argentino para determinar con precisión el estatus sanitario respecto a las principales patologías de las abejas endémicas de Argentina. Además, esto permitió descartar la presencia de signos clínicos compatibles con las plagas parasitarias exóticas e individuos que la causan.
Senasa también indica que la información generada por la ejecución de muestreos estructurados no aleatorios como la inspección sanitaria previa a la que se sometieron hasta el 2011 alrededor de 2.500.000 colmenas trashumantes, constituye otra prueba de la ausencia de las plagas bajo estudio, reforzándose con la información suministrada por laboratorios privados, provinciales o de universidades quienes procesan muestras de abejas y descartan en cada una de ellas su presencia.
Es así como Argentina asegura al mundo que dichas plagas no han ingresado a su territorio, una afirmación científicamente fundada, por lo que también ha implementado otras medidas y acciones para mantener dicho estatus. Algunas de ellas son las exigencias cuarentenarias para autorizar el ingreso de abejas reinas al país y a la región, el cuidado fronterizo en el momento de autorizar la introducción al país de productos de origen vegetal (principalmente frutas tropicales); la adecuación, ya realizada, del marco normativo que establece a la plaga como enfermedad de denuncia obligatoria; un sistema de vigilancia epidemiológica en funcionamiento y los procedimientos de atención de sospechas atentos a cualquier notificación.
Y es que el ingreso de estas plagas al país podría desencadenar una serie de graves consecuencias sanitarias, además de importantes pérdidas económicas por lo que el Senasa se mantiene presente recordando la obligatoriedad de que se le notifique ante cualquier sospecha vinculada con estas plagas, para actuar de acuerdo a la legislación vigente.
Del mismo modo, destacan la importancia de que los productores inscriban sus apiarios en el Renspa, concurriendo a la Oficina del Senasa más próxima, puesto que un registro veraz y actualizado facilita los procedimientos de identificación de colmenares en riesgo en caso de detectarse cualquier evento sanitario.