Diversos son los desafíos que enfrenta la industria de arándanos chilena, teniendo siempre en perspectiva el incremento de los volúmenes de producción y exportación, además de las crecientes exigencias en los mercados internacionales, fundamentalmente Estados Unidos, principal destino de este berry chileno. 

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En opinión de Jorge Retamales, académico de la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad de Talca, se requiere de “un nuevo paradigma” en el proceso de cultivo y comercialización de arándanos frescos. Al respecto, explica que “el panorama ha ido cambiando. Hasta hace diez años teníamos altos retornos y altos porcentajes de fruta exportable y un incremento explosivo en las plantaciones. El incremento de consumo de fruta fresca hoy es menor a la oferta, aumentando la del producto procesado”.

Por eso, señala que este “nuevo paradigma” debe contener “una estrategia integradora de los distintos eslabones de la labor productiva, los que normalmente se manejan de manera separada”. Detalla que se trata de “un triángulo virtuoso, en el cual tenemos como primer eslabón a los productores, que están preocupados del campo y su objetivo es lograr el máximo porcentaje de fruta exportable; luego los exportadores que toman la fruta y la llevan a los mercados de destino. El foco de este eslabón es la vida de poscosecha. Finalmente la fruta llega a los consumidores”.

Retamales añade que los consumidores, para seguir comprando, exigen más calidad y mejor composición nutricional y que por lo tanto, “debemos apuntar a que el producto llegue con mayor calidad y más consistencia”.

El académico de la Universidad de Talca será uno de los expositores en el Seminario Internacional de Blueberries: Nuevas Tendencias Técnicas y Comerciales de la Industria, que se desarrollará el próximo 28 de agosto en el Centro de Conferencias Monticello, el cual contará con la presencia de expertos nacionales e internacionales. En la ocasión, Retamales expondrá sobre la “Integración de manejos y factores de precosecha y cosecha para optimizar la poscosecha de arándanos”.

En el evento estará también presente Bruno Defilippi, investigador en poscosecha del Instituto Nacional de Investigaciones Agropecuarias (INIA), quien se referirá a la “Variabilidad en el metabolismo de genotipos de arándano y su incidencia en manejos de poscosecha. Experiencias con AM, AC y SO2”.

El experto explica que en Chile los productores de arándanos “han creado y desarrollado cultivos a lo largo y ancho del territorio nacional, desde las regiones casi desérticas hasta las tierras más australes”. Esto implica que han debido enfrentar desafíos climáticos, geográficos y de calidad de suelo y que por ello, la decisión primera -elegir la correcta variedad- puede ser fundamental para el resultado final del proceso productivo. Asegura que los productores deben comprender que la fruta será comercializada en mercados internacionales y que todo lo que hagan en precosecha será clave en poscosecha.

“Si como productor no hice un control adecuado de enfermedades no le puedo pedir a la exportadora o al consultor en poscosecha que haga un buen trabajo, porque la poscosecha nace en la precosecha”, detalla Defilippi. Por eso, es enfático al recordar que la principal dificultad de Chile es que la demanda se localiza en el Hemisferio Norte y que entonces, “la fruta tiene que durar el período necesario para llegar a ese mercado”.

Investigaciones en cosecha y embalaje

Investigadores de la Universidad de Talca señalan que en Chile la producción de arándanos aumentará en un 50% hacia 2017 por lo cual, la industria requiere de soluciones para enfrentar diversos desafíos en cuanto a la cosecha, así como también de embalaje.

Un estudio realizado por Gustavo Lobos, académico de la Facultad de Ciencias Agrarias de la entidad universitaria -y dirigido por Jorge Retamales- analizó las diferencias entre la cosecha manual, semi mecanizada y mecanizada y la incidencia de cada una de ellas en la calidad de poscosecha de las variedades Brigitta y  O'Neal. El estudio determinó un promedio para ambas variedades, según el cual la proporción de fruta para el mercado fresco fue de 71,9; 76 y 82,9% para cosechadora automotriz, vibradora y manual, respectivamente.

La investigación concluyó que la cosechadora automotriz genera una gran proporción de fruta que no cumpliría con los requisitos para exportar en fresco mientras que en el caso de la cosecha con vibrador, los niveles de firmeza de la fruta y las proporciones de fruta dañada, tanto en la cosecha y después de 60 días de poscosecha, son similares a los resultados de la recolección manual. En ocasiones, la calidad de la fruta fue superior con vibradora, probablemente debido al daño causado por el cosechero al jalar la fruta del racimo.

El embalaje de este berry es otro desafío. Y es que el envío de arándanos chilenos por barco requiere mantener la calidad y condición de la fruta por un largo período de viaje. Bajo este contexto, la investigadora Claudia Moggia, profesora de la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad de Talca, realizó un estudio que se centró en la hora de cosecha, el tipo de bolsa (tamaño y número de perforaciones) y el sellado de la bolsa. Se utilizaron bolsas de polietileno de baja densidad (50 micrones de espesor y perforaciones de 0,3 mm2) y arándanos de la variedad Brigitta de un huerto orgánico localizado en la ciudad de Linares. La fruta fue recolectada en el peak de la cosecha (14 de enero de 2011) en dos muestras: de 9 a 10 hrs. y de 15 a 16 hrs. y se mantuvieron a 20-25°C durante seis horas, bajo sombra, previo al proceso de embalaje y guarda en frío.

Los ensayos mostraron que el embalaje en ambiente de atmósfera modificada aumentó la proporción de fruta sana después de un largo almacenamiento (45 días), mediante reducción de la deshidratación de la fruta. El embalaje o envasado en ambiente de atmósfera modificada permitió disminuir la pérdida de firmeza del fruto. El momento en que las bolsas fueron selladas tuvo poca influencia en los resultados. El envasado en ambiente atmósfera modificada tiene el potencial de aumentar la vida poscosecha de la fruta y permitiendo su llegada a los mercados de larga distancia, con una alta proporción de frutos sanos.

El Seminario Internacional de Blueberries: Nuevas Tendencias Técnicas y Comerciales de la Industria, se desarrollará el próximo 28 de agosto el Centro de Conferencias Monticello (San Francisco de Mostazal, Chile). Para mayor información haga click AQUÍ

Fuente: Blueberrieschile.cl