Almendras tendrían efectos beneficiosos en personas con diabetes tipo 2
Nuevos estudios han revelado, una vez más, los beneficios que las almendras y otros frutos secos tienen en la dieta de las personas, ya que existiría una relación entre el consumo regular de estos productos y el control de la glicemia en personas con diabetes tipo 2 y síndrome metabólico.
Un estudio clínico aleatorio controlado investigó los efectos que tendría sobre la diabetes y los factores de riesgo de enfermedades del corazón, la adición de 42,5 gramos de almendras a la dieta de 21 adultos con diabetes tipo 2 mal controlada, por un período de 12 semanas.
Los participantes en el grupo que consumió almendras (cuya edad media es de 57,8 años) experimentaron una reducción de casi un 30% en los niveles de proteína C-reactiva (PCR), un marcador de la inflamación asociada con el aumento de riesgo de enfermedad cardíaca, en comparación con los participantes que no consumieron almendras (cuya edad media era de 54,7 años). Además, los participantes no experimentaron ningún cambio en la masa corporal después de 12 semanas de consumo de almendras.
"Estos hallazgos sugieren que la adición de almendras a la dieta puede ser una estrategia simple y eficaz para ayudar a reducir la inflamación en las personas con diabetes mal controlada", dijo Karen Sweazea, PhD, profesora asistente en la Universidad Estatal de Arizona y principal investigadora del estudio, en un comunicado emitido por California Almonds.
Actualmente, se cree que la inflamación desempeña un papel en las enfermedades del corazón, diabetes y otras enfermedades crónicas, y la PCR elevada está relacionada con un mayor riesgo de enfermedad cardiovascular en personas con diabetes tipo 2.
Respecto a los resultados del estudio, y según lo informado, tampoco hubo diferencias observadas después de 12 semanas entre los grupos en cuanto a presión arterial, lípidos, glucosa en ayunas u otras medidas de control de glicemia, incluso en los biomarcadores de estrés oxidativo u otros marcadores de la inflamación. No obstante, el estudio se vio limitado por el pequeño tamaño de la muestra y la dependencia de registros dietéticos incompletos y auto-reportes.
Otros dos meta-analisis realizados en la Universidad de Toronto demostraron que el consumo de frutos secos está asociado con efectos positivos sobre el control glicémico en adultos con diabetes tipo 2 o síndrome metabólico, un conjunto de factores de riesgo asociado con el aumento del riesgo de enfermedades cardiovasculares.
En uno de ellos se realizó una revisión sistemática de los efectos de los frutos secos sobre los criterios del síndrome metabólico, donde se incluyeron 47 ensayos aleatorios controlados con más de 2.200 participantes. Los investigadores encontraron que el consumo de cerca de 50 gramos de almendras por día -durante un promedio de ocho semanas- se asoció con reducciones significativas en los triglicéridos y la glucosa en la sangre en ayunas.
Cabe señalar que en este proceso, no se observaron efectos adversos sobre la circunferencia de cintura, colesterol HDL, o la presión arterial, lo que sugiere un beneficio metabólico global a raíz del consumo de frutos secos.
Pese a lo anterior, el estudio se vio limitado debido a la corta duración de los ensayos (menos de 12 semanas).
El segundo meta-análisis examinó el efecto del consumo de frutos secos sobre el control glicémico en pacientes con diabetes. El análisis incluyó 12 ensayos clínicos aleatorios con 450 participantes adultos y encontró que las dietas que contienen frutos secos en una dosis media de cerca de 56 gramos por día -durante un promedio de ocho semanas- redujeron significativamente la glucosa en la sangre en ayunas y el HbA1c (una medida de control a largo plazo de la glucosa) en comparación con las dietas sin frutos secos.
Al igual que en los estudios mencionados anteriormente, no se observaron efectos significativos en cuanto a la insulina en ayunas o resistencia a la insulina.
A raíz de lo anterior, los investigadores sugieren que el perfil nutricional único de los frutos secos puede ser un factor que contribuye a conducir un mejor control glicémico en estos estudios, sobre todo en el contenido de magnesio y grasas monoinsaturadas (MUFA).
Y es que entre los frutos secos, las almendras contienen una proporción particularmente alta de MUFA, proporcionando 9 gramos por porción de 28,3 gramos, lo que corresponde a aproximadamente el 50% de sus calorías totales, y se encuentran entre las fuentes dietéticas más altas de magnesio.
En general, el perfil de nutrientes de las almendras, las describe como bajas en el índice glicémico y proporcionan un paquete de nutrientes de gran alcance incluyendo la proteína de lucha contra el hambre (6g/oz), fibra dietética (4g/oz), grasas "buenas" y vitaminas importantes y minerales tales como la vitamina e (7,3mg/ml), magnesio (77mg/ml) y potasio (200mg/ml), junto con su versatilidad y múltiples formas, lo que las hace una merienda inteligente para las personas con intolerancia a la glucosa o diabetes tipo 2.