Trufas, el diamante negro que promete dar una alternativa al campo chileno
Trufas, un producto gourmet, caro y que pocos pueden permitirse. Sin embargo, en Chile las cosas son diferentes. Se pretende que la trufa sea parte de los platos cotidianos, ofreciendo un toque diferente y gourmet, pero al alcance no sólo de unos pocos.
En Portalfruticola.com, conversamos con Rafael Henríquez, gerente técnico de Agrobiotruf, quien nos explicó cómo es la situación de este cultivo en Chile.
En Chile, este negocio partió hace 16 años, y ya se cuenta con una superficie con huertos de distintas edades que sobrepasa las 300 hectáreas.
“Es un cultivo que está naciendo desde el punto de vista productivo. Hoy Chile está cosechando cerca de los 100-120 kilos de trufas por año”, explicó.
“Es un huerto que tiene un PIB sobre el 25% como huerto, entonces es un cultivo que hoy es una alternativa más para el campo chileno. Actualmente, ya está manejada la técnica, ya somos mirados desde fuera como un país productor de trufas”.
Por otro lado, comentó que ya se han llevado a cabo pruebas gastronómicas del producto con chefs italianos, norteamericanos, brasileños, etcétera. “La fruta que tenemos es de muy buena calidad”, indicó.
Si bien Chile exporta algunos kilos de trufa, Henríquez explicó que el problema en la actualidad es que falta superficie para que el país se transforme en exportador de trufa con volúmenes importantes.
“Las hectáreas productivas son muy pocas, aún no tenemos una masa productiva adulta que nos permita exportar grandes volúmenes”.
“Hay un desconocimiento cultural respecto del producto, y para eso estamos trabajando muy fuerte para poder hacer ver que la trufa no es un producto exclusivo de las clases más adineradas. Un buen plato trufado no requiere más de 3 mil a 5 mil pesos chilenos (entre 4 a 7 dólares) para darle un toque especial. El problema es que hoy nos enfocamos en el precio por kilo, que puede rondar un millón de pesos (USD 1.500)”.
“Hoy pensamos en exportar a Estados Unidos, Brasil, China, que son países que están entrando en el consumo de la trufa. Estamos intentando animar los canales para poder exportar más volúmenes de nuestra trufa”.
“Se está llegando poco a poco a considerar la trufa como un producto más dentro de nuestra gama de posibilidades”.
La trufa necesita suelos bien aireados y drenados, y en ese sentido Chile no es muy bueno, por lo que se requiere hacer buenos estudios de clima y suelo. Actualmente, hay plantaciones desde la región del Maule a la región de Los Lagos.
“El cultivo está respondiendo muy bien a este proceso de investigación, que duró 16 años, cada día mejora más. Todos los meses hacemos capacitaciones para la gente que está interesada, vienen de toda Sudamérica para aprender”.
“Queremos que Chile le pierda el miedo a la trufa, que la disfrute y se atreva a cocinarla, hacer que forme parte de nuestra alternativa gastronómica, como asociación esperamos que aumente el consumo interno, pero nuestro objetivo es la exportación”, indicó.
Por ahora, se exportan volúmenes pequeños hacia Estados Unidos (alrededor de 5 kilos); a Canadá, “se exporta lo que se puede”; pero “los países que están demandando nuestra trufa son Alemania, países Árabes, Japón, China, pero los volúmenes que ellos necesitan aún no los tenemos”, indicó.
Hoy se exporta la fruta en fresco, pero hay un nicho de los productos elaborados en base de trufa en Chile, como aceites, cremas y reducciones balsámicas, que también se están vendiendo en otros países.
Henríquez señaló por otro lado, que la trufa con un buen tratamiento en frío puede durar perfectamente 20 días.
“Nuestro objetivo es lograr volúmenes por sobre las 1000 hectáreas establecidas, ojalá llegar a mover un volumen importante y que la gente conozca la truficultura para tener una buena productividad y lograr un rubro exitoso”, expresó.
Fotografía: Wikicommons/Autor: Richard Giles