Avanzan negociaciones para el programa brasileño de trazabilidad
Después de un exitoso proyecto piloto en el que participaron 30 supermercados del estado de Santa Catarina, los principales grupos del sector público y privado en el país están avanzando con un proyecto de trazabilidad que abarca una amplia gama de métricas.
En un comunicado, el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Abastecimiento (MAPA) y la Asociación Brasileña de Supermercados (ABRAS) dijeron que avanzaron en las negociaciones y establecieron términos de cooperación que ampliarán el acceso de los agricultores a las buenas prácticas de producción agrícola integrada.
El objetivo de la iniciativa es reducir los costos de producción y, al mismo tiempo, beneficiar a los consumidores a través de alimentos más sanos y libres de residuos que plantean riesgos para la salud.
El Programa de Trazabilidad y Rastreo de Alimentos (RAMA) se extenderá ahora a otros estados sureños de Rio Grande do Sul y Paraná, mientras que los centros de abastecimiento de las metrópolis de São Paulo (CEAGESP) y Minas Gerais (CEASA Minas), estimularán a los proveedores a producir alimentos más seguros y más trazables.
RAMA tiene su base en el control de frutas y hortalizas, particularmente en términos de plaguicidas utilizados desde la producción hasta el punto de venta. El Ministerio informa que el principal objetivo es asegurar que los residuos encontrados en los alimentos no estén por encima de los niveles que plantean riesgos para la salud y estén en niveles legalmente permitidos.
El superintendente de Abras, Márcio Milan, dijo que la entidad y el ministerio estaban buscando maneras de incluir a todos los involucrados en la cadena de suministro de frutas y verduras, incluyendo fabricantes de pesticidas, para asegurar productos seguros de buena calidad.
Los agricultores recibirán capacitación a través del programa para ofrecer productos de mayor valor agregado a los minoristas para que puedan vender alimentos seguros.
Milán dijo que los productos en los que el exceso de residuos agroquímicos eran los más preocupantes incluyen chiles, frutillas y naranjas.
Dijo que la iniciativa también fue diseñada de una manera que las medidas de protección no aumentarían los costos para los consumidores.
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