El presidente panameño Juan Carlos Varela firmó la semana pasada el contrato entre el Estado y la compañía Del Monte, permitiendo a la multinacional invertir más de US$100 millones en la reactivación de la producción bananera.

La inversión se realizaría durante varios años por la subsidiaria de Del Monte, Banapiña, en las provincias occidentales de Chiriquí y Bocas del Toro, según la publicación de Terra.

Varela dijo que el acuerdo generaría más de 3.100 empleos directos y 12.000 indirectos y una vez implementado, la operación implicaría "una producción de 900 hectáreas por año, con una productividad media anual de 2.275 cajas de banano por hectárea".

"Reanimaremos la región económica y socialmente con esta inversión (Del Monte) y los casi 200 millones de dólares que estamos invirtiendo en el distrito de Baru", dijo Varela.

Las regiones de producción en cuestión, son descritas por tener tasas de desempleo significativas.

El acuerdo, aprobado por la Asamblea Nacional en abril, fue aprobado por la Contraloría General de la República y tiene una duración de 20 años.

La historia informó que hasta marzo de 2008, Chiquita Brands tenía el monopolio de la comercialización de bananos en el distrito de Baru.

Sin embargo, la empresa decidió abandonar este negocio y transferirlo a los trabajadores agrícolas, que se agruparon en una cooperativa llamada Coosemupar, según la información. Lamentablemente, no pudieron relanzar el sector.

Del Monte, ha estado interesado en invertir en Baru desde 2009, agregó.

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