La industria Australiana de frutillas vuelve a sufrir después de que se encontraran agujas en unas frutillas en Nueva Zelanda durante el fin de semana.

La cadena de supermercados neozelandesa Countdown, propiedad del grupo australiano Woolworths, retiró la marca Choice de frutillas australianas, después de que un cliente en Auckland encontrara agujas en el producto.

La fruta provenía de Australia Occidental, lado opuesto desde donde comenzó la crisis, en el sureste de Queensland. Aún no está claro dónde ocurrió la contaminación en la cadena de suministro.

"En Countdown nos tomamos muy en serio la seguridad alimentaria y retiramos las frutillas Choice que quedaban a la venta en los supermercados Countdown, SuperValue y FreshChoice mientras investigamos esto con nuestros proveedores", informó Countdown en un comunicado.

"Los clientes podrán devolver cualquier marca de frutillas Choice que tengan en casa a Countdown para su tranquilidad y un reembolso completo”, agregó la compañía.

Añadieron que “como precaución adicional y siguiendo consejos similares a los dados por las autoridades de salud pública en Australia, los clientes deberán cortar cualquier frutilla australiana antes de comerla".

La cadena enfatizó que no ha habido reportes de enfermedades o lesiones en Nueva Zelanda, y que están en contacto tanto con las autoridades de Nueva Zelanda como con las australianas mientras se investiga el asunto.

"Esto no afecta a las frutillas de Nueva Zelanda que ahora están en nuestras estanterías", enfatizó la cadena.

Tras iniciado el escándalo de las agujas, el Departamento de Agricultura y Recursos Hídricos de Australia implementó medidas de control interino para las exportaciones de frutillas con un enfoque de "tolerancia cero" a los contaminantes metálicos.

En una declaración entregada a Portalfruticola.com, un vocero del departamento le indicó a autoridades neozelandesas que estaban investigando el informe y que “hasta el momento estaba sin confirmar”.

“El producto tendría que haber sido exportado antes que se implementaran las medidas de control más fuertes”, comentó el vocero.

Añadió que “el departamento tiene confianza en que las fiscalizaciones más severas van a contener el riesgo y entregaran seguridad a los socios comerciales”.

El viernes, policía en el sur de Australia acusó a un hombre de Adelaide por haber reportado falsamente la compra de frutillas contaminadas en un supermercado metropolitano. El hombre de 34 años comparecerá ante el Tribunal de Magistrados de Adelaide el 24 de octubre.

"La policía desea advertir al público que se aplicaran sanciones graves por hacer declaraciones falsas a la policía, en particular, en relación con la reciente contaminación de la fruta", indicó la policía del sur de Australia.

La noticia llega después tras demostraciones de apoyo masivas para la industria por parte de los consumidores australianos, con la industria de frutillas de Queensland y la asociación de productores agradeciendo a todos por el "amor de frutilla".

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