El oídio en frutales: Síntomas y control
El contenido de este artículo de nuestra sección de Agrotecnia fue elaborado por www.inia.cl, el cual fue revisado y reeditado por Portalfruticola.com
Oídio, llamado popularmente blanquilla o cenizilla es el nombre de una enfermedad criptogámica de las plantas. Está producida por varios géneros de hongos ectoparásitos de la familia de las erisifáceas, que atacan principalmente hojas y tallos jóvenes.
Uno de los más conocidos es el de la vid, provocado por la especie Erysiphe necator. Otro muy extendido es el que ataca a rosales, begonias o robles, producido por varias especies del género Podosphaera, como P. pannosa.
Síntomas del oídio
La enfermedad se manifiesta en todos los órganos aéreos de la planta (hojas, ramillas y frutos). En el caso de las hojas se observa un polvo ceniciento de color blanco en ambas caras de la hoja, que corresponde a micelio del hongo con gran número de conidias o esporas producidas en cadena sobre la superficie del tejido.
Las hojas afectadas tienden a curvarse hacia arriba, plegándose sobre la nervadura central, tomando un color rosado grisáceo y luego castaño, caen prematuramente disminuyendo la vida útil del árbol. Las ramillas afectadas también se encuentran cubiertas por el hongo, observándose manchas blanquecinas, para pasar a grisáceas cuando las condiciones dejan de ser favorables para el desarrollo del hongo.
Estas ramillas quedan más débiles y no logran su crecimiento normal, produciéndose grietas longitudinales y transversales en la corteza, lo que se traduce en menos madera frutal para el año siguiente y un reservorio de la enfermedad.
La infección en los frutos comienza también al inicio, como una capa blanquecina que puede llegar a cubrir gran parte o la totalidad de su superficie, para finalmente tomar un color café, quedando el
fruto manchado, lo que se conoce como ‘russet’.
Diseminación del oídio
Las conidias del hongo son diseminadas por el viento.
Sobrevivencia del oídio
El hongo permanece durante el invierno en ramillas y yemas enfermas; las esporas son formadas en la época de la caída de pétalos de las flores; estos infectan los diferentes órganos de las plantas en primavera (comenzando con la infección primaria en caída de pétalos).
Medidas de control para el oídio
El control de esta enfermedad debe ser principalmente de tipo preventivo, siendo la época de aplicación un factor decisivo, por lo cual las aplicaciones deben iniciarse en plena flor y repetirse cada 15-20 días dependiendo del efecto residual de los fungicidas utilizados y mantener protegido el árbol hasta el endurecimiento del carozo, momento en el cual los frutos ya no son infectados, pero es importante señalar que los otros tejidos verdes del árbol continúan siendo susceptibles.
Programa de control
El programa de control se puede iniciar con aplicación de azufre y mantener un programa preventivo basado en este elemento fungistático. En el caso de huertos con daños por la enfermedad la temporada anterior o cuando se trata de una variedad susceptible; se recomienda comenzar el programa con el uso de un fungicida sistémico y especializado en el hongo; luego se continúa con azufre si las condiciones no favorecen el desarrollo de la enfermedad.
Fuente: www.inia.cl
Foto de portada: aprogip.agripa.org