Cáncer bacteriano en frutales de carozos y manzanos
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Síntomas del cáncer bacteriano
El cáncer bacteriano se caracteriza por ser una enfermedad muy destructiva de los árboles ya que se presenta como cancros elípticos en troncos y ramas madres, o como una necrosis completa de centros florales, dardos, ramillas e incluso del árbol completo.
Foto 1. Necrosis en tallos.
Alrededor de estos cancros ocurre también una exudación profusa de goma. Una planta afectada por esta patología muestra, al remover la corteza, estrías y manchas acuosas, de coloración castaño rojizas, además de un olor agrio muy característico
Diseminación del cáncer bacteriano
La bacteria( Pseudomonas syringae pv. syringae) es diseminada por agua y viento.
Sobrevivencia del cáncer bacteriano
En las yemas y en cancros que se encuentran en las ramas o troncos afectados, la bacteria permanece en forma epifítica en malezas.
Foto 2. Exudaciones de goma en ramas afectadas por cáncer bacteriano.
Medidas de control del cáncer bacteriano
El control de esta enfermedad es principalmente de tipo preventivo, asegurando contar con plantas sanas al momento de iniciar una plantación. Es importante también que el huerto se encuentre con buen vigor, ya que plantas débiles, mal regadas, en sectores de suelos pobres, se afectan más que plantas vigorosas bien regadas o plantadas en suelos profundos.
El exceso de nitrógeno también es un elemento de predisposición y susceptibilidad al ataque de la bacteria, en cambio una planta equilibradamente nutrida soportará mejor.
Foto 3. Ramas muertas.
El control preventivo debe efectuarse con aplicaciones de fungicidas a base de sales de cobre en otoño a caída de hoja (20, 60 y 80% de hojas caídas), para continuar durante el invierno si las condiciones ambientales (lluvia, heladas) favorecen el desarrollo de la bacteria.
El control curativo se basa en la extirpación de cancros y protección de heridas con pinturas sellantes. También es relevante sacar del huerto las ramas o árboles muertos, ya que constituyen una fuente de inoculo.
Foto 4. Yemas muertas.
Fuente: www.inia.cl
Foto de portada: www.emr.ac.uk
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