Desarrollan tomates resistentes a la salinidad con portainjerto chileno
A través de la "cruza" entre un tomate silvestre y otro cultivado, investigadores del INIA están desarrollando un proyecto para crear tomates resistentes a la salinidad.
Estos portainjertos, cien por ciento chilenos, se desarrollarán a través del proyecto FONDECYT 1180958; donde se cruzarán especies chilenas de tomates silvestres y locales para zonas que presentan este tipo de estrés (salinidad).
Al respecto, el Dr. Juan Pablo Martínez, investigador perteneciente al grupo de Investigación en Fisiología y Biología Molecular Vegetal del INIA; región de Valparaíso, explicó a PortalFrutícola.com que “estamos estudiando el mecanismo de tolerancia de este portainjerto a la salinidad". Agregó que los portainjertos tolerantes a la salinidad, resultantes del cruzamiento interespecífico entre Solanum lycopersicum cultivado y el tomate silvestre Solanum chilense; podrían mejorar el rendimiento y los atributos de calidad de la fruta de tomate antes y después de la cosecha en plantas injertadas bajo condiciones salinas (NaCl).
Lo interesante de esta investigación es que los portainjertos, al ser desarrollados con material local, permitirán “obtener productividades aceptables; y frutos de calidad en suelos con esta limitante; existiendo interesantes mecanismos de tolerancia frente a este tipo de estrés”.
Desarrollo del proyecto en tomates
Actualmente, este proyecto se realiza con otros grupos de investigadores de la Universidad Austral de Chile y la Universidad Católica de Lovaina, Bélgica; con el objetivo de promover el intercambio científico y cooperación nacional e internacional entre ellos.
Al respecto, Martínez expresó que “nosotros no queremos modificar las variedades comerciales; queremos modificar el “zapato” para que produzca la misma variedad comercial arriba y podamos ampliar la zona”.
Afirmó que, en un contexto de cambio climático, el hecho de que las plantas y cultivos sean resistentes a la salinidad es algo cada vez más relevante.
Asimismo, Martínez explicó que “estas tolerancias se pueden replicar en otros cultivos; y que ya se están haciendo en cucurbitáceas, melón y otros frutales. Es un mundo que hay que desarrollar e ideal si se realiza esto tomando en cuenta las condiciones chilenas”.
El desarrollo de esta investigación en fisiología de portainjertos en tomate resistente a la salinidad, en el contexto el cambio climático, constituye uno de los estudios del Grupo de Investigación en Fisiología y Biología Molecular Vegetal de Inia La Cruz, liderado por Dr. Juan Pablo Martínez.
Estos estudios, dijo el Dr. Martínez, “son un real ejemplo de que en la práctica se puede aplicar las ciencias agronómicas y estar acorde a la realidad de los distintos países que están desarrollando tecnología de punta”.