Este artículo es una continuación de nuestro especial Celebración Día de Las Américas, donde destacamos a algunos de los principales países productores de nuestra región.

Alejandro Pannunzio, presidente de la Asociación de Productores de Arándanos de la Mesopotamia Argentina APAMA, habló con PortalFrutícola.com, sobre los desafíos, metas y expectativas que tiene el gremio para el futuro.

De acuerdo con Pannunzio una de las primeras acciones que quieren tomar es comenzar un proyecto de mejoramiento genético en variedades que se adapten a su zona.

“Hasta ahora lo que hemos hecho ha sido emplear variedades que son desarrolladas por el programa de Florida… y bueno la realidad es que tenemos algunas características adicionales que resolver”, comentó.

Explicó que al estar lejos de los mercados necesitan una variedad que se adapte al transporte marítimo. Una variedad que pueda resistir el viaje y que tenga una buena vida poscosecha.

“Vamos a tener que buscar con algún programa de mejoramiento que estamos iniciando con el INTA y con la Universidad Nacional de Entre Ríos”, indicó.

Comentó que, si bien hay una transición hacia nuevas variedades quizás un poco lenta –“hay que hacer eso con más velocidad, mientras vamos desarrollando nuestra variedad local”-, deben ir incorporando otras variedades para la transición que buscan con las características ya mencionadas.

Alejandro Pannunzio, presidente de la Asociación de Productores de Arándanos de la Mesopotamia Argentina.

Retos

Otro desafío que tienen, para este periodo señaló Pannunzio, es generar colaboración para lograr máxima competitividad.

Lo anterior mediante la toma de acciones internas y externas; ya sea aumentando niveles de producción de fruta por hectárea para ser más eficientes con los costos, como trabajar de la mano de instituciones gubernamentales para fortalecer y mejorar su posición en los mercados.

En lo que concierne a la competitividad, el dirigente explicó que Argentina en los últimos años no tuvo un crecimiento significativo en la industria de los arándanos.

“Ahí tenemos un desafío pendiente para resolver”, añadió. Pese a ellos destacó la mayor experiencia que tienen por la cantidad de años en el negocio.

Sin embargo, recalcó, lo anterior no ha sido suficiente para mantener la porción del mercado.

“Tenemos que hacer esfuerzos adicionales y seguramente revisar algunas acciones que hemos llevado adelante, que por ahí no han causado el efecto que buscábamos”.

Expectativas

En términos de lo que espera lograr este año, en el que fue ratificado nuevamente como presidente de su asociación, Pannunzio comentó que buscar integrar las necesidades de sus asociados, independiente de lo distintos que puedan o no ser, con el fin de priorizar y resolver las necesidades más cruciales de sus segmentos.

Argentina en el último tiempo ha estado adelantando el comienzo de su campaña, iniciando de forma temprana en julio con pequeños volúmenes exportados.

Para esta temporada, que esperan termine en diciembre, estiman un crecimiento de entre el 10% y 15%. Lo anterior depende, por supuesto, del invierno y el impacto que tenga en los cultivos.

El país actualmente envía la mayor parte de sus arándanos a EE.UU., con menores cantidades a Europa Continental e Inglaterra y otros mercados pequeños.

China se ha proyectado como un destino con gran potencial, sin embargo, el arancel actual de entrada, del 15%, resulta ‘prohibitivo’ para los productores.

La esperanza es poder negociar el impuesto y así llegar a un arancel cero.