El USDA publicó su informe semestral de frutas frescas para Chile y proyecta disminuciones en la producción de manzanas y peras, con aumentos esperados para las uvas de mesa.
Según el informe, la mejora de las condiciones climáticas ha contribuido a la recuperación del sector de la uva de mesa en Chile, aumentando la cosecha final de 2021-22 a 760.000 toneladas métricas (MT), un aumento del 15,2% en comparación con la temporada anterior. Esto refleja la disminución de la cosecha en 2020-21 debido a las lluvias en enero de 2021.
A pesar del aumento de la cosecha global del cultivo, la superficie plantada de uva de mesa ha disminuido en un 5,2 por ciento en comparación con el año anterior, hasta las 43.104 hectáreas, lo que el USDA atribuye a problemas relacionados con la sequía y a los bajos márgenes de rendimiento para los productores.
Para esta temporada, el Servicio Agrícola Exterior (FAS) del USDA estima que los volúmenes de exportación se recuperarán de una disminución del 1,6 por ciento en los envíos observados de enero a marzo de 20222, en comparación con el año anterior, como resultado de los retrasos logísticos en los puertos chilenos.
Sin embargo, desde marzo de 2022, el USDA comentó que sus fuentes indican que los volúmenes de exportación aumentaron significativamente, y la temporada total debería situarse en 600.000 toneladas, un aumento del 14,2 por ciento en comparación con el año pasado.
La superficie plantada de manzanas en Chile ha disminuido en el último año en un 4,2 por ciento, ya que los productores de la zona centro-sur del país se han desplazado a cultivos más rentables como las cerezas o las nueces, aunque esto ha sido compensado por los almacenistas que trabajan con trigo o avena en la región de la Araucanía, que se han volcado a las manzanas en su lugar.
Así, la producción de 2021/22 se estima en 1,036 millones de toneladas, un 4,8% menos. Para la exportación, la región proyecta un total de 610.000 toneladas para la temporada, un 5,2% menos que el año anterior. La primera cosecha de manzanas hasta marzo ha bajado un 24,1% debido a problemas logísticos, pero debería recuperarse durante el resto de la temporada y los meses punta de mayo, junio y julio.
La cosecha de peras plantadas en Chile se redujo en el último año en un 11,3 por ciento, una tendencia a la baja en las últimas cinco temporadas, que según el informe se debe a una disminución más rápida que la media de los márgenes de las peras. Teniendo en cuenta esta tendencia a la baja de la superficie plantada, el USDA estima que la cosecha de peras en Chile será de 215.000 toneladas, un 6,9% menos que el año anterior.
También se espera que las exportaciones caigan, un 11,5 por ciento en comparación con el año anterior hasta alcanzar las 112.000 Tm, aunque hasta marzo de este año el descenso es aún más acentuado, con una caída del 16,9 por ciento en las exportaciones hasta el primer trimestre.
