Los productores mexicanos muestran un nuevo énfasis en la sostenibilidad

Los principales productores y exportadores de México están invirtiendo en sistemas de eficiencia hídrica y energética, y tratando de eliminar el desperdicio, en un esfuerzo por abordar muchos de los desafíos ambientales que podrían tener un impacto en toda la cadena de suministro del país.

En la reciente Conferencia de IFPA México, que tuvo lugar en Guadalajara del 22 al 23 de junio, los exportadores dijeron a PortalFrutícola.com “que la sostenibilidad es ahora un elemento central en sus estrategias de negocio, ya que tratan de abordar tanto los problemas de larga duración como los emergentes”.

Cristabel Meza, gerente de medio ambiente del productor de tomate NatureSweet, dijo “que la conversación sobre el agua y la energía renovable es ahora una prioridad en la agenda de la compañía en sus sitios de Jalisco, Colima y Nayarit”

"Como productores hidropónicos, la conservación del agua debería ser sencilla, pero tenemos un reto tecnológico en términos de rentabilidad porque el agua está subsidiada en México", comentó.

"Como el agua efectivamente no cuesta nada para el sector agrícola, hay mucho desperdicio en toda la industria".

Aunque ninguno de los centros mexicanos de NatureSweet carece actualmente de acceso al agua, Meza dijo que la empresa -que obtiene su agua de pozos- estaba planificando una posible sequía a largo plazo tomando medidas preventivas, principalmente invirtiendo en eficiencia energética.

"En cuanto al uso del agua, estamos analizando el impacto a largo plazo que podría tener la sequía en nuestro negocio y estamos volviendo a instalar tubos para recircular el agua que fueron suspendidos por el virus de la fruta Rugosa que afectó la producción de tomate entre 2018-19", explicó.

"Dentro de eso, estamos utilizando sistemas ultravioleta para la desinfección. También estamos analizando el diseño de los invernaderos para identificar cuáles son los más eficientes en el uso del agua."

Al igual que con el agua, la energía para la agricultura recibe importantes subvenciones del gobierno mexicano, lo que significa que ha habido pocos incentivos para que los cultivadores inviertan en fuentes de energía renovables. Sin embargo, Meza dijo que NatureSweet estaba planeando instalar paneles solares en lugares de producción remotos donde el suministro de energía suele estar en riesgo y el mantenimiento es poco fiable.

"Estamos planeando instalar paneles solares para reducir este riesgo, pero al mismo tiempo asegurándonos de mantenernos dentro de los cinco megavatios permitidos sin tener que obtener más permisos gubernamentales", reveló.

Fortune Growers, el importador con sede en Chicago, lleva más de 16 años produciendo en México, primero a través de productores  asociados y ahora mediante su propia producción, las cual proviene de su rancho insignia en Dolores Hidalgo, Guanajuato, así como de sitios en Puebla, Tlaxcala, Veracruz, Aguascalientes, Zacatecas, Hidalgo, Tamaulipas.

Aunque sólo comenzó con 1 millón de cartones de brócoli hace 10 años, Fortune es ahora el exportador número uno de brócoli fresco a Estados Unidos, produciendo 4 millones de cartones cada año, así como zanahorias, lechuga, col y apio.

"Cuando empezamos en México como distribuidores, nos fijamos en aquellos productos que empezaban a tener problemas de abastecimiento en EE. UU., principalmente por los problemas en California con el acceso al agua y los trabajadores de temporada", explica Giovanna Paola Barbosa, de la empresa. "Producir en México nos permite cultivar brócoli en volúmenes importantes".

Sin embargo, con el objetivo de lograr un negocio más preciso, predictivo y regenerativo, Barbosa dijo que Fortune pretendía crear un "ecosistema" que garantizara que ninguna de sus producciones se desperdiciara.

"Somos conscientes de que no sólo exportamos brócoli, también exportamos agua, así que nuestro uso del agua está controlado porque queremos ser responsables", aseguró.

"Queremos utilizar el 100% del agua que tomamos, y estamos trabajando con el gobierno para poner en marcha sistemas eficientes de almacenamiento de agua que también ayuden a mejorar la productividad. Se trata de recuperar todo lo invertido y volver a invertir esos mismos recursos".

El segundo objetivo sostenible de Fortune, continuó, es lograr una mayor eficiencia en la producción. "Hemos plantado 65.000 plantas de brócoli en nuestros campos y el objetivo es utilizar el 100% de esas plantas, por lo que hemos empezado a abrir mercados para las hojas de brócoli y los tallos de brócoli para hacer un arroz vegetal, que es similar al arroz de coliflor.

"Si no hacemos estos cambios, no vamos a poder seguir produciendo", añadió Barbosa.