Con una cosecha similar a la Thompson Seedless, INIA-G4 la supera en rendimiento y costo
En Chile existen dos programas de mejoramiento genético de uva de mesa, el Consorcio INIA-Biofrutales y el Consorcio de la Fruta de ASOEX con la Pontificia Universidad Católica de Chile.
En cuanto al Programa de Mejoramiento Genético de Vides inició su labor en INIA La Platina, en 1988 , apoyados por CORFO y a cargo de Jorge Valenzuela Barnech, donde la línea de trabajo desde su partida fue la búsqueda de variedades con buenos atributos comerciales, buen rendimiento, exportables y con buen comportamiento en postcosecha.
Ya en el 2000 comenzó la alianza entre INIA y Biofrutales propiamente tal y a lo largo de este trabajo conjunto han surgido nuevas variedades de uva de mesa como Maylen®, INIA-G3 e INIA G4, lo cual a generado que a través de la investigación se realicen aportes en ingeniería genética, biotecnología, sostenibilidad de los cultivos, detección de enfermedades y en la generación de frutas que respondan a lo que los consumidores quieren.
Este surgimiento de nuevas variedades no es por que sí, existe una necesidad de recambio de varietal debido a las exigencias del mercado y la necesidad de la industria de superar la caída en hectáreas cultivadas, en un momento existían 40 mil hectáreas en Chile plantadas con uva de mesa, ahora no superan las 30 mil.
De estos temas y en especial de la nueva variedad INIA G4, Portalfrutícola.com puedo profundizar con los profesionales a cargo del Programa de Mejoramiento Genético de Uva de Mesa INIA-Biofrutales, María Cecilia Peppi y Rodrigo Cruzat, y el Director de INIA La Platina, Bruno Defilippi, quien además es especialista en postcosecha.
María Cecilia Peppi, a cargo del Programa de Mejoramiento Genético de Uva de Mesa INIA-Biofrutales, junto a Rodrigo Cruzat, apoyados por el Director de INIA La Platina, Bruno Defilippi, especialista en postcosecha.
¿Cómo se ven la aceptación de la variedad INIA G4 dentro de los productores?
INIA-G4 ha despertado gran interés, presenta una serie de características que los productores están buscando: alta productividad, manejo simple, buena postcosecha (+45 días). Si bien hay otras variedades blancas que están siendo probadas en la industria, por su fecha y sus características creemos que hay un espacio importante para INIA-G4.
¿ Si se tuvieran que quedar con solamente con tres atributos, cuáles serían?
Uno, la alta fertilidad y productividad, dos la facilidad en el manejo y tres la buena postcosecha en términos de mantener una calidad global del racimo para tránsitos largos.
Esto implica una buen una buena firmeza, y que no presenta pardeamientos, desgrane ni partiduras.
¿Hay un trabajo de promoción planteado o que ya esté en marcha?
Efectivamente. Hay varias etapas en la promoción del producto. Una primera se refiera a la validación como alternativa varietal que se hace a través de los días de campo en los 3 sitios donde probamos nuestras selecciones. INIA-G4 ha venido probándose durante varios años y eso ha ido confirmando su valor para la industria.
Una segunda etapa es a nivel de validación en manos de los productores. Esta etapa está mostrando sus primeros resultados, de algunos ensayos pre comerciales que se hicieron en estos años, pero lo más interesante lo veremos cuando las primeras plantaciones comerciales comiencen a dar sus frutos; el desarrollo de variedades toma tiempo.
Una tercera etapa, que sucede paralela a las otras, se refiere a la difusión comercial del producto, a través de exposiciones, charlas y prensa. Eso ya partió el año pasado en la Expo Vid 2022 y esperamos seguir adelante.
¿Perciben en los productores un deseo de realmente reemplazar variedades, qué obstáculos han visto para ello. INIA-G4 es una alternativa prometedora en reemplazo de Thompson Seedless por qué?
La industria de la uva de mesa ha sufrido una serie de cambios desde hace ya algunos años. Los márgenes de ganancia se han reducido, y hoy debemos apuntar a altas producciones y calidad con los menores costos posibles. La oferta varietal se ha multiplicado y distintas variedades han ido posicionándose en cada zona productora. Existen diversas interrogantes respecto a nuevas variedades desarrolladas mayoritariamente en el extranjero y su comportamiento en nuestras condiciones edafoclimáticas. Esto conlleva cierto grado de incertidumbre que puede frenar el recambio o explicar algunos problemas en los primeros años productivos debido a manejos desacertados.
La variedad Thompson Seedlesss fue por muchas décadas la principal variedad producida y exportada por nuestro país, pero esta situación ha cambiado radicalmente debido los rendimientos y costos productivos de esta variedad. INIA-G4 tiene una fecha de cosecha similar a Thompson Seedless, sin embargo, la supera ampliamente respecto a rendimiento y costos, por lo que representa una excelente opción de recambio.
¿Cómo se ha dado el comportamiento de la variedad en Vicuña?
Las plantas de INIA-G4 son de vigor relativamente alto, han mostrado un buen desarrollo y en su segunda producción han dado alrededor de 2.800 cajas/ha (se esperan sobre 3.800 cajas/ha en régimen) con calibres sobre los 22 mm. La fruta no es particularmente sensible al sol, y mantiene un buen color crema incluso con 20-21% de sólidos solubles.
¿Cuál es el gran desarrollo biotecnológico implícito en el desarrollo de INIA G4?
Convendría señalar que este es un programa de mejoramiento convencional apoyado de algunas herramientas biotecnológicas como marcadores moleculares y rescate de embriones, es decir, el mejoramiento lo hace sobre la base de hibridaciones y selección recurrente. INIA-G4 es, por lo tanto, una variedad que resulta de un trabajo convencional de mejoramiento.
Ahora bien, el PMG y Biofrutales trabajan estrechamente con otras áreas de la biotecnología como es la edición génica, donde se espera en algún momento poder generar parentales de alto valor o directamente variedades mejoradas. Precisamente en INIA La Platina hay uno de los equipos de biotecnología más potente en el país y que no ha detenido su esfuerzo por poder aportar desde esa disciplina. Actualmente se está avanzando en líneas de uvas de mesa con mayor resistencia a hongos y que están en sus primeras fases de validación funcional.
¿Comercialmente cuáles son las proyecciones y cómo se está trabajando con los potenciales productores?
El esquema comercial de esta variedad está a cargo de la empresa ANA Chile, quien ha definido un modelo de negocio por etapas, ofreciéndola primero a las 14 exportadoras que han estado trabajando con ANA para estos desarrollos. En términos de royalties tiene un esquema tradicional pero más austero y flexible que otros modelos en Chile. Además, ANA Chile ha propuesto que las primeras 50 ha puedan pagar sus royalties de manera diferida, reconociendo lo difícil que es hoy invertir para un productor.
Es muy difícil saber hoy cuanto va a ser la participación de mercado de una nueva variedad, especialmente en una industria que está con convaleciente, pero tenemos confianza en que este producto va a ir haciéndose un espacio en la medida que lo conozcan.
¿En qué otros desafíos están trabajando en el Programas de Mejoramiento Genético de Uva de Mesa?
El PMG continúa desarrollando cruzamientos para obtener uvas sin semilla, de buen calibre, fácil manejo, alta producción, de buen sabor y postcosecha. Buscamos uvas de distintos colores y que abarquen desde el inicio de la temporada, de manera tal que se puedan organizar cosechas escalonadamente durante la temporada. También existen algunas selecciones candidatas con sabores especiales. Estamos siempre atentos a las necesidades de la industria y vemos claro espacio por ejemplo para variedades blancas tempranas, por lo que estamos haciendo esfuerzo por dirigir el trabajo también esa dirección.
Hace algunos años comenzamos también un trabajo de ir construyendo genética con mayor resistencia a estrés biótico pero que fueran comercialmente competitivas. Seguimos en ese esfuerzo que es una línea que tendrá cada vez mayor valor.
¿Con qué apoyos han contado para lograr investigar y aportar a la invención nacional, qué falta cómo organismo público y al sector privado?
El PMG nace a inicios de los 90´s de manera muy exploratoria, pero partir de los 2000 al vincularse con Biofrutales se inicia una nueva etapa d mucho más vigoriza en trabajos y financiamiento, etapa que aún sigue. En esto ha sido fundamental el apoyo del Estado de Chile a través de CORFO, el apoyo de las empresas privadas que están detrás de Biofrutales y el esfuerzo del propio INIA que no ha sido menor. Sin embargo, estamos en una etapa compleja, el financiamiento público comprometido está terminando y el programa no solo requiere seguir, sino que además lo debe hacer con mayor fuerza aun, es decir, invertir más fuerte de lo que veníamos haciéndolo.
La industria sigue necesitando mejores variedades, es te es un desafío que no se agota, y volvemos por lo tanto al origen de la motivación de este programa, que es hacer variedades adaptadas a las necesidades de esta industria. Si quieres seguir siendo actores relevantes no podemos descansar en la sola suerte de que la genética funciones en Chile, debemos construir nuestra propia genética.
A pesar de que este programa ha logrado lanzar al mercado la variedad Maylen®, y ahora INIA-G3 e INIA-G4, aquello no es suficiente para darle sustentabilidad a la investigación. Seguimos necesitando el apoyo del estado, de INIA y de los privados.
¿ Este miércoles 2 febrero 2023 tienen una actividad nos podrían contar de qué se trata?
Equipo del Programa de Mejoramiento Genético en uva de mesa presentará algunos avances en el Día de Campo, en INIA La Platina ubicado en Santa Rosa 11610, La Pintana, Santiago, y es organizado por INIA, Biofrutales y ANA Chile, donde los dejamos invitados a conocer los resultados productivos de esta temporada con la uva de mesa INIA-G4.
La actividad será de 9:00 a 11:00 AM y pueden confirmar su participación aquí
La variedad INIA-G4, ha sido desarrollada en el Programa de Uva de Mesa de INIA-Biofrutales. Es una variedad que se cosecha en época Thompson Seedless, con excelentes características productivas, calidad y condición. Posee racimos cónicos y sueltos, bayas de buen tamaño, color verde suave, textura firme, sin semillas y un agradable sabor. La planta es vigorosa, con buen porcentaje de brotación de yemas y alta productividad, pudiendo obtener alrededor de 4.000 cajas/ ha. El manejo agronómico de INIA-G4 es sencillo y presenta excelente aptitud para el almacenaje refrigerado.
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