La fuerza femenina detrás de la admisión del aguacate guatemalteco a EE.UU
Cuando Gloria Polanco decidió abandonar su carrera en publicidad y marketing por el mundo de la agricultura, jamás imaginó que terminaría dejando una huella permanente en la historia de las exportaciones guatemaltecas.
En 1983, con un quetzal devaluado y una grave escasez de divisas afectando al país debido a los conflictos armados internos de la época, Gloria hizo lo que tantas mujeres en busca de independencia y estabilidad económica han hecho a través de los tiempos: emprender.
Este calculado riesgo, para el cual consolidó todos sus conocimientos en el área del marketing y comercio internacional, dio frutos inesperados. Entre esta primera decisión que la llevó a explorar nuevos caminos hasta su actual cargo como presidenta del Comité de Aguacate de Agexport, hay un sinfín de historias y anécdotas.
Tras una visita a Londres, Inglaterra, Gloria pudo observar de cerca el éxito de frutas tropicales como el mango en los mercados europeos. Este improvisado estudio de campo, le daría años más tarde el empujón final para poner la primera piedra de lo que hoy es Frutesa.
Por esos años, no era común ver grandes estructuras de empresas exportadoras, ni se tenía la logística que existe actualmente para gestionar los envíos.
A través de la agencia Guatexpro, que se dedicaba a apoyar las exportaciones en el país, la emprendedora comenzó a buscar empresas que pudieran estar interesadas en importar mangos desde Guatemala.
Paralelamente, Gloria logró dar con fincas dedicadas a la producción de esta fruta, en parte gracias a la diversificación de cultivos que Anacafé había recomendado al sector agrícola años antes.
Con el producto ya asegurado, solo faltaba confirmar a los clientes potenciales.
La comunicación con los posibles compradores, ubicados todos en el Reino Unido y Francia, lejos de tener la instantaneidad de hoy en día, se dio por completo a través de télex, un sistema similar al fax.
De diez empresas contactadas, cinco se interesaron en la compra de mango guatemalteco, con lo que la nueva empresaria concretó su primera venta oficial tras algunos primeros embarques de prueba.
Sororidad
Si bien este primer envío fue lo que le permitió a Gloria establecer Frutesa y comenzar a cimentar su reputación en el mundo del agro, la emprendedora cita otro punto clave como el momento en el que realmente se transformó en empresaria.
“Junté todo lo necesario. La oferta, la demanda, el material de empaque, el transporte. Los hombres que cortaban la fruta empezaron a traer cantidades enormes de mangos al centro de acopio donde yo estaba, pero no había nadie que pudiera empacarlos. Eso me había faltado prever”, recuerda Gloria de esa primera aventura.
“A medio día, me encontré sentada entre muchos miles de mangos ya cosechados y no tenía idea de qué iba a hacer para empacarlos, cuando empezaron a llegar las mujeres que llevaban los almuerzos a sus maridos, que eran los cortadores de los mangos. Y les dije que yo les podía dar trabajo, si podían ayudarme a empacar”.
La respuesta de estas mujeres no fue inmediata, pues debían volver a dar de comer a sus hijos. Pero la voz se corrió rápidamente y ese día pronto llegaron varias a cobrarle la palabra a Gloria, quién ante la urgencia las contrató de inmediato.
Con este gesto, se forjó una relación laboral que duraría años y que hoy sigue caracterizando a Frutesa, donde la gran mayoría de sus empacadoras son mujeres.
Hoy, la empresa exporta vía aérea y marítima desde Santo Tomás Milpas Altas, en el departamento de Sacatepéquez. Sus productos estrella son las arvejas chinas y dulces, ejote francés, moras y, por supuesto, aguacates.
“Dios sembró los aguacates en Guatemala”
Actualmente, la empresa que Gloria lidera hace 40 años exporta aguacate a la Unión Europea con gran éxito. Sin embargo, la emprendedora tiene sus ojos puestos en el mercado estadounidense.
El gran éxito internacional que ha logrado esta fruta, llevó al Comité de Aguacate de Guatemala a poner en marcha todos los estudios de plagas y tramitaciones para lograr la admisibilidad del producto a los EE.UU.
La documentación, que fue enviada en octubre de 2022, se encuentra hoy a la espera de respuesta por parte de APHIS de la USDA.
“Desde el comité estamos poniéndole mucha energía, dándole seguimiento e impulso y colaborando con todo lo que se pueda para lograr la admisibilidad a los Estados Unidos, que si bien está muy bien servido por la industria mexicana, creemos que tiene todavía oportunidades para nosotros que estamos empezando en pequeña escala,” explica.
La presidenta del comité explica que actualmente están trabajando en identificar todas las brechas de rendimiento para poder poner en práctica nuevas metodologías que permitan mejorar la eficiencia de producción y disminuir la presencia de plagas, que es un problema derivado del clima húmedo del país.
“Nuestra ventaja competitiva es que el aguacate guatemalteco es muy sabroso. La consistencia y el sabor son mucho mejores. Además, podemos llegar a EE.UU, por tierra o por mar, hasta en cuatro días, lo que nos da una buena venta de comercialización con nuestras variedades Hass y Booth 8," asegura.
Como país de origen de esta fruta, Guatemala cuenta con las condiciones climáticas más favorables para su cultivo, las que hoy le permiten tener una producción local prácticamente durante todo el año, con la floración principal concentrada desde mediados de octubre hasta mediados de febrero.